El escultor Fabian Oefner es un maestro de la deconstrucción. Pieza a pieza, este artista desmantela objetos ordinarios y los transforma en obras de arte para destacar su funcionamiento interno. Su trabajo más reciente, The Heisenberg Series, lo lleva a diseccionar seis objetos que ayudan a registrar nuestros recuerdos. Zapatos deportivos, un reloj, una grabadora, una cámara y una caja negra fueron llenados de resina, cortados en pedazos y ensamblados cuidadosamente para formar una escultura. Los resultados son obras de arte que pueden parecer familiares de lejos, pero que comienzan a disolverse a medida que los espectadores se acercan a ellas.
La inspiración de Oefner provino del famoso principio de incertidumbre de Werner Heisenberg. En mecánica cuántica, esto significa que cuando se mide una propiedad, como el momento o la energía, es cada vez más difícil realizar una lectura precisa de una segunda propiedad como la posición o el tiempo. “Apliqué esta idea a estas seis esculturas”, le dice Oefner a My Modern Met. “Cuando los miras desde lejos, puedes identificar fácilmente el objeto. Sin embargo, si comienzas a acercarte para observar el interior, la forma del objeto comienza a distorsionarse y se desvanece por completo. Como observador, nunca eres capaz de mirar el objeto como un todo y su funcionamiento interno simultáneamente. Entre más exactitud tenemos en una vista, menos claridad tenemos en la otra. La interacción con la escultura determina en última instancia su apariencia”.
Cada escultura invita al espectador a estudiar sus detalles y ofrece una intimidad diferente con estos objetos que conocemos tan bien. El proceso creativo es laborioso, ya que Oefner debe crear su propia hoja de ruta sobre cómo desmantelar cada cosa, lo que implica romperlos a veces. De hecho, tuvo que usar dos cámaras Leica, ya que la primera fue destruida por la resina. En cuanto a cómo fueron seleccionados para el proyecto, Oefner consideró cuidadosamente los elementos que utilizó y cada uno se relaciona con el mismo tema: la memoria.
“Todos registran algo”, comparte Oefner. “Con la cámara, la grabadora y la caja negra es obvio: o graban una imagen o una voz, una pieza musical, etc. El reloj lleva la cuenta del tiempo o también se puede decir que lo registra. El menos obvio son los zapatos deportivos. Pero para mí, los zapatos deportivos son como máquinas de grabación que realizan un seguimiento de nuestro movimiento. Los zapatos que utilizamos son Nike Cortez de 1985. A menudo me pregunto acerca de los diferentes lugares del mundo a los que caminaron… , en cierto modo, la serie trata sobre la fragmentación o distorsión de la memoria”.
Fabian Oefner deconstruyó seis objetos ordinarios y los transformó en esculturas de resina fragmentadas.
El escultor une las piezas individuales de los objetos para distorsionar la forma en que los vemos.
Cada objeto fue seleccionado por la forma en que se relaciona con la grabación de recuerdos humanos.
Esto incluye un par de zapatos deportivos, que Oefner llama “máquinas de grabación, que realizan un seguimiento de nuestro movimiento”.
Fabian Oefner: Sitio web | Instagram
My Modern Met obtuvo permiso de Fabian Oefner para reproducir estas imágenes.
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