Ingenieros italianos convierten máscaras de snorkel en mascarillas C-PAP

Máscara de snorkel transformada en mascarilla C-PAP para pacientes de coronavirus

Foto: Isinnova

En este momento crítico de la historia, todo el mundo está aportando sus habilidades y conocimientos para combatir la epidemia del coronavirus. Un problema al que se enfrentan muchos países es la falta de equipo médico, ya que los hospitales están colapsados con pacientes en cuidados intensivos. Esto es particularmente cierto en el caso de los respiradores, que escasean en todo el mundo. Ahora, la empresa de ingeniería italiana Isinnova está ayudando a los hospitales locales a superar la escasez gracias a un invento simple, pero ingenioso.

La innovadora empresa tiene su sede en Brescia, que se encuentra en el epicentro de la pandemia en el país. Situada en la región de Lombardía–donde se encuentran casi la mitad de los casos de COVID-19 en Italia–los hospitales de la zona están completamente saturados de pacientes. Esto ha llevado a los trabajadores de la salud a tomar decisiones difíciles sobre quién puede usar los pocos ventiladores disponibles. Así que cuando el Dr. Renato Favero, antiguo médico del Hospital Gardone Valtrompia, se acercó a Isinnova con una idea, ellos estaban más que dispuestos a escuchar.

El Dr. Favero se acercó a Isinnova con una idea interesante después de oír que la empresa estaba imprimiendo válvulas de emergencia en 3D para otro hospital local. El médico había descubierto que una simple máscara de snorkel hecha por el minorista de artículos deportivos Decathlon podía ser usada como mascarilla C-PAP para terapia subintensiva. Lo único que faltaba era una forma de conectar la máscara a un ventilador. Ahí es donde entró Isinnova.

Después de contactar a Decathlon, quienes suministraron voluntariamente los dibujos CAD de la máscara, el equipo de la empresa se puso a estudiarla. Los ingenieros de Isinnova diseñaron entonces lo que ellos llaman la válvula Charlotte, que puede ser fácilmente impresa en 3D para transformar la máscara.

Personas haciendo snorkel con máscaras de buceo de Decathlon

Foto: Decathlon

El prototipo fue probado por primera vez por trabajadores del Hospital Chiari, cerca de Brescia, y se comprobó que funcionaba correctamente con sus respiradores. Esta colaboración es un ejemplo increíble de cómo los diferentes sectores pueden unirse para resolver problemas durante este difícil momento. Por supuesto, Isinnova enfatiza que la válvula, si bien es funcional, no es un producto médico certificado y sólo debe utilizarse en situaciones de extrema escasez de equipo médico.

“Reiteramos que la idea está diseñada para los centros de salud y busca ayudar en la realización de una mascarilla de emergencia en el caso de una situación muy complicada en la que no es posible en encontrar suministros sanitarios oficiales. Ni la máscara ni la válvula están certificados y su uso está sujeto a una situación de necesidad obligatoria”, escribe Isninnova.

Así, cualquier paciente que acepte usar esta máscara especial debe firmar primero una autorización reconociendo que el equipo es experimental. A pesar de ello, en una situación en la que no hay otras alternativas, esta máscara alterada puede salvar vidas.

Con el fin de evitar que otras empresas produzcan la válvula y la vendan a precios altos, Isinnova ha patentado el diseño. Su intención es hacer que el diseño de la válvula Charlotte esté disponible, de forma gratuita, para cualquier hospital que lo necesite. “Nuestra iniciativa es totalmente sin ánimo de lucro, no obtendremos ninguna regalía sobre la idea de la válvula, ni sobre las ventas de las máscaras de Decathlon”, confirman.

Isinnova ha publicado en su sitio web los archivos de impresión en 3D, así como un formulario de autorización del paciente que es legalmente vinculante en Italia. La compañía advierte que los usuarios en el extranjero deben consultan sus propias leyes locales antes de usarlos para asegurarse de que cumplan con ellas.