El fotógrafo Pau Buscató es un experto en estar siempre en el momento y lugar adecuado. Desde hace cuatro años se ha dedicado a trabajar en las calles en busca de coincidencias. Su estilo de fotografía combina dos (o más) elementos comunes que se vuelven casi mágicos por el simple hecho de estar juntos. Buscató captura sus imágenes desde el ángulo perfecto para que, por ejemplo, el hocico de un perro se alinee con una llave de agua o para que la cabeza de un hombre desaparezca en una nube de humo.
Buscató disfruta buscar estas coincidencias. “Es muy divertido; la ciudad es mi patio de juegos”, escribe el fotógrafo. Para él, ésta es una forma de mantenerse joven de corazón y de no convertirse en un adulto desilusionado. “Construimos muros para vernos más fuertes, más serios, más adultos”, explica Buscató, “y dejamos de lado la parte de nosotros que nos hacía niños, la parte que convertía jardines en mundos fantásticos o árboles en fortalezas”. Su habilidad de ver el mundo “a través de los ojos de un niño” es la base de sus composiciones. “Para mí, jugar es estar consciente del momento, pero al mismo tiempo estar abierto a lo que pueda suceder”. Esta actitud es la que da un aire despreocupado y divertido a sus fotografías.
Próximamente, Buscató tendrá una exposición individual llamada Hopscotch que será inaugurada en otoño 2018 en la Fotografiens Hus en Oslo, Noruega. Puedes ver más de sus coincidencias fotográficas en su página de Flickr.