Construir una casa de jengibre sin que se derrumbe no es una tarea fácil, pero el trabajo de la diseñadora Caroline Eriksson es de otro nivel. Desde 2013, esta artista sueca se ha dedicado a crear impresionantes esculturas de galletas de jengibre inspiradas en el cine. Sus diseños, que pueden tardar unas cinco semanas en completarse, se han vuelto cada vez más ambiciosas con el paso de los años.
Tras elegir el tema de su escultura, Eriksson hace una investigación profunda para crear un boceto 1:1 que utilizará como referencia durante todo el proceso. A partir de ahí, Eriksson crea una sencilla estructura de alambre que sirve como soporte para su escultura y le permite ajustar sus proporciones. El paso final implica colocar las galletas de jengibre en su lugar, que son unidas con azúcar derretida. Eriksson hornea todas sus galletas de jengibre, asegurándose de que sean lo suficientemente rígidas para sostenerse y que al mismo tengan la textura correcta. Se necesitan unos 7 kilos de harina y 11 paquetes de azúcar para producir todas las galletas que necesita esta talentosa artista, las cuales después son cortadas cuidadosamente en las formas necesarias para construir la escultura.
Aunque Eriksson ha construido casas de jengibre desde que era una niña, pronto comenzó a preguntarse qué más se podía hacer con este medio. Al principio, esto la llevó a construir barcos y castillos con galletas de jengibre, pero luego se volvió aún más ambiciosa. “Entré en un concurso de galletas de jengibre en 2013 e hice a Optimus Prime, un robot de las películas de Transformers“, cuenta Eriksson a My Modern Met. “Tuve la idea después de ver la película, pensando que debía ser posible construir un robot si se comenzaba con formas internas simples que sostuvieran la estructura para después añadir capas de detalles por encima. Gané el concurso y la foto del transformer se hizo viral en línea y en revistas. Así empezó todo”.
En los últimos años, Eriksson ha creado varias elaboradas esculturas con galletas de jengibre, desde Smaug –el dragón de El hobbit–, hasta el Xenomorfo de Alien y Darth Vader de Star Wars. Esta Navidad, su inspiración vino de Guardianes de la galaxia, y construyó un enorme Groot sentado en una mesa.
Mientras que la mayoría de sus piezas están directamente relacionadas con su amor por el cine, Eriksson encuentra inspiración en todo, desde la arquitectura hasta la geometría. Esto es evidente en los resultados finales, que muestran un don para los detalles y la construcción de la dimensión a través de la textura. Estos detalles suelen ser los más difíciles de definir, pero son también los más satisfactorios para Eriksson como diseñadora.
“Conseguir los resultados que quiero toma mucho tiempo y experimentación”, admite, “pero eso es también lo que encuentro más divertido: llegar al límite de lo que se puede hacer con este medio”.
Caroline Eriksson es conocida por sus impresionantes esculturas de galletas de jengibre inspiradas en el cine.
Puede tomarle hasta cinco semanas completar una sola escultura, como la de Darth Vader de Star Wars.
La diseñadora sueca hornea sus propias galletas de jengibre para dar vida a personajes como Groot, de Guardianes de la galaxia.
Su nivel de detalle y habilidad para crear texturas increíbles ha hecho que su trabajo se vuelva viral.
Caroline Eriksson: Instagram
My Modern Met obtuvo permiso de Caroline Eriksson para reproducir estas imágenes.
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