Imagen: Imágenes de archivo de bioraven/Shutterstock
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Dibujar la anatomía humana puede ser complicado. Una de las partes del cuerpo más difíciles de dibujar son las manos, especialmente cuando las estás trazando de forma realista. Como con todo lo artístico, la práctica desarrolla tu talento y confianza, por lo que es una razón por la que deberías aprender a dibujar manos. Definitivamente son un desafío, pero cuando logras que se vean tan reales que podrían salir de la página, tu confianza artística seguro aumentará.
Una de las razones por las que dibujar manos es tan difícil es pueden lucir chuecas fácilmente (¡Por eso muchos artists las “esconden” en bolsillos!). Hay una delgada línea entre muy poco y demasiado realismo. Al implicar demasiados pliegues en la piel, puede envejecer dramáticamente (y sin querer) a tu protagonista. Un dedo deforme puede hacer que la mano se vea como una garra. Entonces, cuando comiences la fase inicial de dibujo, es importante que te asegures de que las proporciones de la palma y los dedos sean correctas.
Estructura ósea de la mano humana
Uno de los problemas más grandes que enfrentamos al dibujar manos es que no entendemos por completo lo que hay bajo nuestra piel. Las manos están hechas de 27 huesos. Algunos son muy pequeños y están en la punta de tus dedos y otros son largos y componen la base de la mano. Además de la estructura ósea, hay cuatro partes principales de la articulación: articulaciones interfalángicas (las articulaciones entre los huesos de tus dedos); articulaciones metacarpofalángicas (donde tus dedos se encuentran con la palma); Articulaciones intercarpianas (el punto en el que se encuentran la palma y la muñeca); y la muñeca.
No necesitas memorizar todos los huesos de la mano. En cambio, te recomendamos familiarizarte con la estructura general. De esa manera, cuando intentes imaginar cómo se vería la mano de alguien sosteniendo su teléfono celular o apuntando con su dedo, te imaginarás cómo se moverían sus huesos y articulaciones.
