Foto: Shraga Kopstein
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Cuando estás comenzando a aprender a pintar, debes tomar algunas decisiones. La más básica es qué tipo de pintura vas a utilizar; los tres tipos más populares son acuarela, acrílica, y al óleo. Si bien es fácil notar las diferencias entre las acuarelas y la pintura acrílica y al óleo, es más difícil entender lo que distingue a las otras dos. En ocasiones aparecen en empaques y tubos similares, pero tienen muchas diferencias. Si no estás seguro de qué tipo de pintura te gustaría probar, aquí te explicamos sus diferencias, echamos un vistazo a sus características, así como formas de mejorar tus habilidades.
¿Cuál es la diferencia entre la pintura acrílica y al óleo?
Aunque se ven parecidas cuando salen de un tubo de pintura, hay diferencias fundamentales entre ambas.
Las pinturas al óleo, en el sentido de la historia del arte, son un clásico. Fueron creadas en el siglo XII y han sido usadas para crear algunas de las pinturas más icónicas de la historia como la Mona Lisa y La noche estrellada de Van Gogh. La composición química incluye pigmentos suspendidos en aceite (por lo general linaza). Aunque son atemporales, limpiarlas y mantenerlas requiere un poco más de trabajo. Además, no son compatibles con el agua, por lo que para diluirlos o limpiarlos, deberá usar aguarrás o alcohol blanco.
Las pinturas acrílicas, por otro lado, son mucho más recientes. Se comercializaron por primera vez en la década de 1950 y tienen pigmento suspendido en una emulsión de polímero acrílico. A diferencia de las pinturas al óleo, no se necesitan productos químicos especiales para diluir los acrílicos, el agua es suficiente. Este aspecto hace que esta pintura sea ideal para principiantes.
Foto: Tookapic
Pinturas al óleo vs. pinturas acrílicas
Tiempo de secado
Una de las principales diferencias entre las dos pinturas es el tiempo que tardan en secarse. Las pinturas al óleo se secan lentamente. El pigmento puede tardar días en fijarse completamente, lo que te permite alejarte de un trabajo en progreso y volver a él después. Cuando lo hagas, puedes continuar donde lo dejaste. Debido a que son tan maleables, funcionan bien en pinturas de estilo realista: puedes manejar la pintura y mezclarla para que las transiciones se vean perfectas.
Los acrílicos, por otro lado, se secan rápidamente. En algunos casos pueden tardar solo unos minutos en fijarse. Si estás trabajando en un estilo gráfico o prefieres terminar tu pintura en una sola sesión, los acrílicos son lo que necesitas.
Resistencia a la luz
La resistencia a la luz es la propiedad que describe qué tan rápido se desvanecerá un color cuando se exponga a la luz. Las pinturas al óleo y las acrílicas reaccionan de forma diferente.
Las pinturas al óleo se desvanecen con el tiempo. Si alguna vez has visto una pintura antigua, notarás que tiene un tono amarillento; esto se debe a que el pigmento se apaga con el tiempo, por lo que el aglutinante de aceite es más notorio.
Los acrílicos tienen una excelente resistencia a la luz. En el futuro se verán tan bien como ahora.
Capacidad para experimentar
Esta es una de las más grandes diferencias entre las pinturas acrílicas y al óleo—y la acrílica es claramente la vencedora.
La pintura acrílica es conocida por su disposición para experimentar. Esto se debe a los “medios”, sustancias que, al ser mezcladas, permiten a los acrílicos adquirir propiedades especiales que de otra manera no tendrían. Por ejemplo, puedes incorporar medios que hagan que la pintura sea más espesa o que aumenten el tiempo de secado y logren que los acrílicos se comporten más como pinturas al óleo.
Las pinturas al óleo no tienen la misma flexibilidad. Así que, si deseas experimentar, elige el acrílico.
