Piensa en el bordado como una gran sombrilla. Debajo de ella hay una gran variedad de técnicas, cada una con un estilo y aspecto distintivo, todo ello con solo aguja e hilo. El punto de cruz es una faceta del bordado, y uno de los enfoques más populares que existen. De hecho, es probable que los haya visto sin darte cuenta; los trabajos de punto de cruz parecen estar “pixelados” y las puntadas parecen pequeñas “x” en la tela.
Debido a la estructura inherente del punto de cruz, esta técnica es fácil de aprender. En términos básicos, solo debes hacer pequeñas puntadas diagonales en una tela de tejido abierto. A medida que cambias de color, se formará un diseño estilizado que tiene un atractivo gráfico sin igual. Esto se aprecia mejor en proyectos contemporáneos de punto de cruz con toques de humor contemporáneo.
A continuación, conoce los materiales que necesitarás, información y consejos básicos, y videos útiles para aprender a hacer punto de cruz por tu cuenta.
¿Quieres aprender a hacer punto de cruz? Sigue leyendo para descubrir información básicos y videos útiles.
Materiales para punto de cruz
Si ya tienes experiencia con el bordado, estás de suerte; los materiales utilizados en otros tipos de bordado sirven para el punto de cruz.
Tela — La principal diferencia que verás entre el punto de cruz y otros tipos de bordado es el tipo de tela que utilizarás. Si alguna vez has visto un bordado en punto de cruz con atención, habrás notado que la tela tiene una textura especial y y un tejido pronunciado. Esta tela es conocida como tela de tejido uniforme, lo que significa que hay un número par de hilos verticales y horizontales en cada centímetro. Entre más alto sea el número de hilos, más fino (y por lo tanto más apretado) será el tejido.
La tela Aída es la más popular para estos bordados, aunque otras telas de tejido uniforme también funcionarán.
Aro de bordar — El aro de bordar es la base sobre la que crearás tu diseño. Al estirar la tela sobre un aro circular o rectangular, quedará tensa y podrás bordar sin molestias.
Hilo — El hilo de bordar es el otro material básico. Después de todo, ¡no puedes bordar sin él! El hilo DMC de seis hebras es uno de los hilo de bordar más populares en el mercado y está disponible en 400 colores, así que seguro encontrarás el tono que necesitas para tu proyecto, en especial si lo diseñaste tú. Si está siguiendo un patrón, lo más probable es que el diseñador te sugiera ciertos colores.
Aguja — El punto de cruz generalmente usa una aguja de tapiz de punta roma. (¡Una gran noticia para tus dedos!) El tamaño de la aguja variará según la tela en la que estés cosiendo. Nuevamente, si estás siguiendo un patrón, las instrucciones te dirán lo que necesitas usar.
Tijeras — Las tijeras pueden no parecer importantes, pero tener un par de tijeras pequeñas y afiladas puede hacer una gran diferencia mientras cortas el hilo. No tienes que gastar mucho dinero en un par para conseguir unas de gran calidad. Mira lo que te recomendamos en nuestra guía de las mejores tijeras de bordado.
Cómo hacer las puntadas básicas del punto de cruz
Aunque el punto de cruz es conocido por sus marcas diagonales, hay algunos tipos de puntadas que verás en los patrones. Usarlos le dará a tu trabajo variedad visual y ayudará a darle vida a tu diseño.
Puntada básica de punto de cruz
Técnicas de punto de cruz: inglesa y danesa
Puntos fraccionarios
Punto lineal o backstitch
Cómo leer un patrón de punto de cruz
A diferencia de otras formas de bordado, un diseño de punto de cruz viene con su propio cuadro detallado que te muestra cuándo y dónde usarás un determinado color o puntada. Puede parecer confuso al principio, pero una vez que aprendas a descifrar un patrón, sus instrucciones te parecerán muy sencillas.
Consejos para bordar en punto de cruz
Ahora que tienes los materiales, y sabes las puntadas y cómo leer un patrón, estas son las cosas que necesitas saber antes de comenzar un proyecto de punto de cruz.
Prepara tu tela antes de empezar. Antes de iniciar cualquier proyecto, deberás preparar tu tela para que todo salga bien. Esto no es difícil y consta de solo un par de pasos. La primera es asegurarte de que no se deshilache. Notarás, especialmente con la tela tejida, que los bordes se deshacen cuanto más la manipulas. Para detener esto, dale una puntada en zigzag alrededor de los bordes, ya sea a máquina o a mano. Esto detendrá el deshilachado (también puedes doblar cinta adhesiva sobre los bordes). Una vez que hayas terminado con eso, plancha la tela para que quede plana.
Empieza a trabajar en medio de la tela. Asegúrate de tener suficiente espacio para completar tu patrón comenzando en el medio de tu tela. Puedes encontrar el centro doblando la tela una vez y luego otra vez al revés. Haz una pequeña puntada o coloca una aguja o alfiler en la esquina doblada. Cuando abras la tela, ese debe ser el centro.
Encuentra el centro de tu patrón. Una vez que hayas determinado el centro de tu tela, busca el centro de tu patrón. Por suerte, esto es fácil de encontrar. En los gráficos de punto de cruz, se delimita con una flecha, un “0” o triángulos.
Mantén una tensión uniforme con tu hilo. A medida que trabajes, asegúrate de no tirar demasiado fuerte de las puntadas mientras las pasas a través de la tela. Hacer esto deformará el material y hará que se frunza. Si el hilo está demasiado suelto, creará espacios en tu diseño. Trata de lograr una uniformidad para que las puntadas queden planas contra la tela.
Sigue el patrón. Lo bueno del punto de cruz es que tiene una técnica sencilla; sigue las instrucciones al pie de la letra y deberías tener un hermoso diseño una vez que hayas terminado. Así que siéntate y disfruta de un momento lejos de la pantalla y al lado de un proyecto hecho con tus propias manos.
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