Proyecto DIY: Cómo pintar un cuarto en 5 sencillos pasos

Foto: Patryk_Kosmider/Depositphotos
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De todos los proyectos DIY que puedes hacer en tu casa, pintar una habitación es uno de los más accesibles. Ya sea que un cuarto necesite una nueva capa de pintura o que quieras transformar su estética por completo, pintar las paredes de tu casa es bastante barato y puede hacer que tu hogar se sienta como nuevo.

Pintar una habitación es mucho más sencillo de lo que crees, siempre y cuando tengas las herramientas correctas. Afortunadamente,, puedes encontrarlas en línea o en tu ferretería local. Una vez que tengas todos los materiales, puedes empezar a pintar. Se trata de una actividad orientada al proceso con una serie de pasos que deberás seguir en orden. Por lo tanto, si te gusta este tipo de trabajo —si te gusta la satisfacción de limpiar, por ejemplo— lo más probable es que te guste la pintura de interiores.

A continuación, conoce los materiales que necesitarás, los pasos a seguir y algunos trucos y consejos que harán que pintar una cuarto sea una gran experiencia.

Materiales esenciales para pintar una habitación

Para pintar con eficacia y pulcritud, deberás asegurarte de tener estos materiales a mano (además de la pintura, por supuesto).

Brochas (o pinceles)

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Las brochas, junto con los rodillos, son algunas de las herramientas más importantes que necesitarás durante este proceso. Puedes usarlas para recortar esquinas, es decir, pintar las orillas de los rodapiés, el techo y otros lugares que el rodillo no puede alcanzar. Un par de brochas de diferentes tamaños serán muy útiles, y una brocha biselada te ayudará a cortar esquinas.

Un utensilio para pintar esquinas también es muy popular a la hora de pintar rodapiés y enchufes, pero las brochas son más versátiles para otros proyectos del hogar. Una buena brocha te durará décadas si la cuidas bien.

Cubiertas y mango de rodillo

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La cubierta de rodillo (y su mango) será el material más importante para aplicar la mayor parte de la pintura en la pared. Los mangos de metal están estandarizados para que puedas comprar fundas de rodillo y estar seguro de que encajen.

Los rodillos suelen venderse en diferentes tamaños y texturas. Los de media pulgada, por ejemplo, suelen funcionar bien para superficies semilisas y semirugosas. Asegúrate de revisar el paquete para saber qué tipos de superficies funcionan bien con el rodillo que vas a comprar.

Varilla larga para el rodillo

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Puede parecer una herramienta innecesaria, pero tener una varilla de extensión hará que pintar las paredes facilísimo. La varilla ajustable se enrosca en la base de la brocha del rodillo, y puedes pintar la pared —incluso las partes altas— sin tener que subirte a una escalera. También te permite estar más lejos de la pared para que no te lastimes el cuello.

Charola de pintura

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Una charola de pintura no tiene que ser sofisticada. Solo necesita ser suficientemente resistente como para retener una cantidad considerable de pintura y soportar el movimiento del rodillo sobre ella.

Lona protectora

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Es muy difícil limpiar la pintura de la alfombra o del suelo, así que te recomendamos proteger tu espacio con una lona. Las láminas de plástico son más baratas, pero una lona no se mueve ni se desplaza tanto. Además, se puede reutilizar fácilmente para futuros proyectos domésticos.

Cinta de pintor

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La cinta de pintor es otro material esencial para proteger tu hogar. Esta cinta azul se coloca a lo largo de los rodapiés y alrededor de los enchufes. Al igual que la tela, puedes optar por una cinta más barata, pero probablemente no será tan gruesa como la de mejor calidad, y correrás el riesgo de que la pintura se cuele por debajo del borde de la cinta y llegue a las superficies que querías evitar pintar.

Escalera

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Si tienes una varilla de extensión, no deberías necesitar subirte a una escalera para pintar con el rodillo. Sin embargo, la cosa cambia cuando se trata de encintar y recortar esquinas. Para asegurarte de que alcances el techo, ten a mano una escalera.

Abridor y mezclador de pintura

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Sacar la tapa de una lata de pintura es difícil de hacer solo con los dedos, y un abridor de pintura puede ayudar. Una vez abierta la lata, tendrás que mezclar la pintura con una varilla. La buena noticia es que estas dos cosas suelen ser gratuitas al comprar pintura. Solo tienes que pedirlas en el mostrador de pintura.

Pasos básicos para pintar un cuarto

Independientemente del color o la superficie que vayas a pintar, el proceso para hacerlo probablemente es el mismo (suponiendo que no es necesario imprimar todo el espacio de antemano). Encintar y recortar esquinas es lo que más tiempo lleva, así que si quieres dividir la labor en varias sesiones, un buen lugar para parar es después de recortar las esquinas. Puedes aplicar la pintura con el rodillo más tarde para terminar el trabajo.

Paso 1: Prepara la habitación

Antes de empezar a pintar, prepara tu habitación. Mueve todos los muebles al centro de la habitación y cúbrelos, o sácalos del espacio por completo. A continuación, con un destornillador, retira los marcos de los enchufes y de los interruptores de la luz.

Si hay agujeros en la pared, séllalos con masilla. Una vez que todo esté seco, lija e imprime las zonas que hayas sellado y aplica una textura en aerosol. Por último, limpia cualquier superficie sucia en la pared.

Foto: Sara Barnes / My Modern Met

Paso 2: Pon cinta en el cuarto

Toma la cinta de pintor y cubre todos los rodapiés, los marcos de los enchufes, el techo y cualquier otra cosa que quieras proteger de la pintura. Después de pegar la cinta, vierte parte de la pintura en tu bandeja.

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Paso 3: Recorta las esquinas con tu brocha

Recortar significa pintar a mano las áreas que el rodillo no puede cubrir adecuadamente. Opta por pintar una línea del ancho de tu brocha alrededor o por encima de estas áreas.

Tal vez estés preguntándote: ¿cuál es el punto de hacer este paso? La razón tiene que ver con precisión. Pasar el rodillo por encima de un rodapié es muy complicado y no tendrás las líneas precisas que sí obtienes cuando usas una brocha. Lo mismo pasa con los enchufes. Por eso es buena idea pintar esas áreas a mano; el trabajo final se verá mucho más limpio y habrá menos cosas que retocar después.

Este paso toma mucho tiempo, sombre todo en comparación con el rodillo. Sin embargo, el resultado vale la pena. Pon un podcast y verás que el tiempo se pasa volando.

Foto: Sara Barnes / My Modern Met

Paso 4: Pasa el rodillo por las áreas recortadas

Una vez que termines de recortar, llegó la hora de sacar el rodillo. Desliza la cubierta de la brocha del rodillo sobre su mango, fíjala a la extensión (si lo necesitas) y pasa el rodillo por la bandeja de pintura. Muévela hacia delante y hacia atrás por las ranuras de la bandeja para asegurarte de que la pintura cubre el rodillo por completo y de manera uniforme. Una vez que el rodillo esté bien saturado pero no chorreando pintura, pásalo por la pared, empezando por la parte superior y trabajando en líneas rectas hacia abajo. Repasa cada lugar un par de veces: una para que la pintura llegue a la pared y otra para asegurarte de que se ha repartido uniformemente.

Foto: Sara Barnes / My Modern Met

Paso 5: Aplica una segunda capa y/o recoloca tus muebles

Dependiendo de la pintura, es posible que tengas que repetir el proceso de recortar y pintar con el rodillo para que la pintura cubra completamente la pared. O tal vez no. En cualquier caso, una vez que todo se haya secado, busca si hay zonas que deban ser retocadas; tal vez te hayas saltado alguna. Con una brocha, aplica la pintura en esas zonas.

Cuando estés satisfecho con la cobertura, retira la cinta adhesiva y vuelve a colocar las tapas en los enchufes. Recoge la tela y recoloca los muebles en la habitación. ¡Disfruta de tu cuarto renovado!

Consejos para pintar exitosamente una habitación

Compra el tipo de pintura adecuado para tus paredes

La pintura variará en función de la habitación. Los baños, por ejemplo, requieren una capa brillante, mientras que en una oficina quedará mejor un acabado mate. Los marcos de las puertas y los alféizares de las ventanas suelen llevar pintura a base de óleo. Asegúrate de utilizar la pintura adecuada para la superficie que vas a cubrir.

Invierte en pintura de buena calidad

Si puedes, vale la pena invertir en pintura de buena calidad. No se resquebraja fácilmente y tendrá mejor aspecto con el paso de los años.

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Cuida tus materiales y compra de buena calidad cuando puedas

A menos de que contrates a un profesional, esta probablemente no será la única habitación que pintes. Si gastas un poco más en materiales y los limpias bien podrán durante por años.

¿Vas a pintar un espacio grande? Compra una cubeta de cinco galones y mezcla tu pintura allí.

Si vas a pintar un espacio realmente grande que requiere más de un galón de pintura, compra un cubo de cinco galones. Vierte toda la pintura en ese cubo y mézclala. Esto te ayudará a tener un color uniforme, ya que los tonos pueden variar de un galón a otro. Siempre puedes vaciar el cubo en los botes de pintura cuando hayas terminado.

Pide ayuda a un amigo.

Pintar es más divertido (y más rápido) si tienes a alguien que te haga compañía. Busca un compañero que te ayude a encintar o recortar esquinas. Te sorprenderá lo rápido que se va el tiempo.