Artista usa siluetas de cartón para tomar fotografías encantadoras al atardecer

“Algunos momentos están más allá de las palabras”

“No estoy seguro de por qué tienes que sujetar la cola del tipo que tienes delante. Me alegro de ser el último en la fila”.

“El plan era atacar al atardecer, así que me preparé para la batalla que tenía por delante. A horcajadas en mi Corgi blindado, me sentí extrañamente invencible, sin preocuparme en lo más mínimo de que sus rechonchas pero poderosas piernas me mantuvieran cerca del suelo y, por lo tanto, en medio del tumulto. No importa. En mi experiencia, no había ningún corcel más confiable que mi amada Annette, y no tenía ninguna duda de que volvería a ganar. Y así, después de una palmadita firme en su cuerpo tembloroso, levanté mi espada en alto, solté un aullido triunfal y fui a la carga en en el combate. De acuerdo, “carga” no es realmente la palabra correcta. Annette hizo eso de saltar corriendo que suele hacer. Pero el punto es… la batalla comenzó”.

“Mi sobrina Emily está de visita desde Massachusetts, así que la llevaré a algunas aventuras clásicas de Florida. Primera parada: ¡Paseo en delfines! ¿Alguien más quiere venir?”

“¡Oye! ‘¿Quién mordió mi manzana?', Pregunté a los tres presidentes. ‘No puedo mentir', dijo George. ‘Yo no lo hice'. ‘No me llaman ‘Abe, el honesto' por nada'. Dijo Abraham. ‘Yo tampoco lo hice'. Luego fue el turno de Donald. Se tragó lo que tenía en la boca y simplemente dijo: ‘¡Obama!'”

“No le pregunté cómo se le habían atorado los anillos de plástico en el cuello. Estaba feliz de poder ayudar”.

“En un momento en el que la violencia y el odio profundo literalmente arden en todo nuestro país, ofrezco esta imagen como un llamado a la paz y una oración para que un día todos los niños y niñas negros puedan crecer en Estados Unidos con respeto, oportunidades y seguridad”.

“Fue una noche oscura; no salí hasta mucho después del atardecer. En realidad, no pude ver mucho. Pero viendo lo bueno, creo que encontré la primera luciérnaga de la temporada”.

“Está bien, pequeño. Puedes hacerlo. Solo una palabra y será tuyo. Puedes decir: John? Jaaawwwn”.

“¿Ya podemos cambiar? Creo que ya tuve suficiente de la caja de leche”.

“Realmente nunca lo había pensado mucho … pero esta noche, mientras mis hermanos cantaban una y otra vez sobre su tipo favorito de gusano y mis hermanas picoteaban ácaros de sus plumas, se me ocurrió la idea de que tal vez había sido adoptado”.

“Conoces esa expresión: ¿Mira antes de saltar? Sí, tal vez un vistazo rápido no sea una mala idea”.

“Cuando Impala Safari promete “excursiones cercanas a la naturaleza”, es en serio”.

“Hay más racismo por allá”, dije.
“¡Hulk golpea!”, respondió Hulk.

“Cuando realmente lo necesitamos, no hay nada mejor que un amigo fuerte en quien apoyarse. Alguien que se quede ahí parado y escuche. Como un robot gigante”.

“Después de que la estricta ley de usar correas entró en vigor, las cosas se pusieron un poco raras entre Goofy y yo”.

“Cuando me pidieron que fuera a una cacería de patos, esto no es para nada lo que esperaba”.

“Los verdaderos amigos permanecen a nuestro lado cuando las cosas se ponen difíciles.”

“‘¿Vienes por mí?', le pregunté a la Muerte.'¿Es por el virus?' ‘Oh, no', respondió la Muerte. ‘Solo pensé en podar estos arbustos'.

“Sombra pensó que podía saltar a través del cañón. No pensé que pudiera hacerlo.
Ella decidió intentarlo.
Desafortunadamente, yo tenía razón”.

“De todos los días que tenía para llevar a mi vaca a dar un paseo, tenía que elegir este”.

“Fue un gran honor estar en el campo mientras las tortupalomas salían del huevo”.

“Casi nunca pido direcciones. Pero cuando finalmente admití que estaba perdido, un lugareño de la playa se ofreció a llevarme”.

“¿Sabes cuando imaginas que la vida de otra persona es más cómoda de lo que realmente es? Sí, así es como me sentí en la casita del perro”.

“Los profesionales médicos creen que el calor puede debilitar el virus, así que mantengo a mi dragón cerca”.

“Era una de las puestas de sol más hermosas que había visto en mi vida, pero el pequeño pingüino en mi hombro seguía hablando de sardinas, sardinas, sardinas”.