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Los árboles ginkgo biloba son muy queridos por sus singulares hojas amarillas con una elegante forma de abanico. Si bien se ven hermosas en las ramas, mantienen su belleza una vez que se desprenden; así, cubren el suelo con un resplandor solar. El fotógrafo de paisajes Dongne Jjisca muestra este momento mágico de la naturaleza con sus imágenes. En un par de fotos especialmente mágicas, Jjisca plasma dos perspectivas de árboles ginkgo biloba: una vista desde las alturas del enorme árbol y otra que muestra sus hojas revoloteando antes de caer al piso.
El ginkgo biloba es un árbol de importancia histórica. Considerado un “fósil viviente”, sus fósiles de hojas datan de hace 270 millones de años. Esto lo convierte en un compañero apropiado para una de las estructuras arquitectónicas que se ven en las fotos de Jjisca. La imagen en la que un ginkgo de 400 años de edad deja caer sus hojas fue tomada frente a Ungok Seowon, una institución confuciana construida en 1602. Ubicada en Gyeongju en la provincia de Gyeongsang del Norte, Corea del Sur, este sitio es un elemento clave del patrimonio cultural del país. Junto con el majestuoso árbol, la escena es tan pintoresca como histórica.
A continuación, ve más de las imágenes de Jjisca. Además de los árboles de ginkgo, sus fotos muestran la belleza de otros árboles y cómo interactúan con el entorno, tanto urbano como natural.
Dongne Jjisca plasma la belleza de los árboles ginkgo biloba en sus hermosas fotos de paisajes.
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Además de los árboles ginkgo, sus fotos muestran la belleza de otros árboles y cómo interactúan con el entorno, tanto urbano como natural.
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Dongne Jjisca: Instagram | Naver
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