Puede que no asocies la palabra “aventura” con las fotos de una boda, pero echa un vistazo a las increíbles imágenes de Gabe McClintock y verás que de hecho funciona muy bien. Este fotógrafo retrata a parejas enamoradas frente a escenarios increíbles y produce fotos que van mucho más allá de lo que podríamos esperar de este género. McClintock, que radica en Calgary, fotografía a sus sujetos junto a impresionantes paisajes montañosos, mares interminables y, quizá lo más sorprendente, un volcán activo en Islandia.
Las fotos del volcán se ven como algo de otro mundo. Los recién casados, Nina y Rand, están vestidos con ropa formal y son iluminados por la brillante llamarada que está justo detrás de ellos. “Fotografiar allí arriba mientras la lava fluía fue verdaderamente espectacular”, le cuenta McClintock a My Modern Met. “Cuando subimos la colina, podías ver el cielo rojo y sentir el aire caliente en tu piel antes de ver la lava. Cuando llegamos a la cresta, ver la lava roja fluyendo fue algo que nunca olvidaré”.
Realizar esta sesión fue todo un logro para McClintock, que lleva 18 años fotografiando bodas. Pero incluso como profesional experimentado, las fotos para esta boda necesitaron consideraciones especiales debido al entorno. “Desde los intensos vientos y la lluvia hasta el aire caliente y frío (dependiendo de la dirección del viento) o el gas de dióxido de azufre que te dejaba sin aliento y te hacía llorar cuando el viento cambiaba. Fue toda una aventura y Nina y Rand estuvieron increíbles durante la sesión”.
El volcán activo es solo uno de los lugares que visitaron durante la sesión de Nina y Rand. McClintock también les tomó fotos en la playa de Reynisfjara y en la base de la cascada de Skógafoss. Cada imagen tiene un hermoso sentido del dramatismo, al tiempo que capta el espíritu creativo de la pareja y su personalidad intrépida.
Aunque ciertamente es una sesión de fotos increíble, McClintock aún tiene planes ambiciosos. “Hay muchos lugares en los que sueño con tomar fotos a una pareja”, dice. “Pero el Parque Nacional de Lençóis Maranhenses, en Brasil, y la cueva de Hang Son Doong, en Vietnam, son dos lugares que están en mi lista de deseos en este momento. Si alguien que lea esto está buscando algo allí, me encantaría hablar”.