El amor incondicional de una madre es universal. Tanto humanos como animales tenemos un vínculo inquebrantable con nuestros hijos, algo que demuestra un video reciente grabado por Michael Austin. Este hombre recientemente visitó el Zoológico Franklin Park de Boston con su esposa, Emmelina, y su bebé de un mes de edad, Canyon. Mientras estaban en el recinto de los gorilas, conocieron a una gorila hembra llamada Kiki y a su propio hijo, un bebé gorila de 7 meses llamado Pablo. Austin filmó el increíble momento en el que su mujer y Kiki se encontraron a través del cristal y presentaron a sus bebés.
“Mi mujer levantó a nuestro hijo para enseñárselo a Kiki, que estaba al otro lado del recinto”, recuerda Michael. “Entonces Kiki tomó a Pablo y lo puso en su pierna para llevarlo hasta nosotros”. A pesar de las barreras que las separaban—tanto la barrera física del cristal como el hecho de no poder comunicarse en sus propios idiomas— las dos madres pudieron conectar por el amor que ambas sienten por sus hijos. “[Kiki] nos hablaba con las manos”, dice Michael. “Pablo incluso acercó su cara al cristal en un momento dado y lo miraron juntos, tocándose las narices. A mi mujer y a mí se nos llenaron los ojos de lágrimas”.
En un momento dado, Emmelina acerca la pequeña mano de Canyon al cristal. Kiki inmediatamente alza la mano para tomarla e incluso intenta lamerla. Está claro que Kiki entiende lo precioso que es el bebé humano, y parece estar realmente emocionada por su visita.
El video de la familia se ha vuelto viral en YouTube, y es fácil ver por qué. Es un ejemplo conmovedor de un momento de compasión entre humanos y animales, y una inusual mirada a la brillante complejidad e inteligencia emocional de los gorilas.
Mira el momento en que Kiki, una gorila en un zoológico, lleva a su bebé a conocer a una madre y a su recién nacido al otro lado del vidrio.
Michael Austin: YouTube
h/t: [The Dodo]
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