Entrevista: Poderosas fotografías de olas capturan la dualidad del océano

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El océano siempre ha sido parte de la vida del fotógrafo Luke Shadbolt, quien se crió en la costa Australia. La marea era algo omnipresente; una constante desde su infancia hasta su vida adulta. Esta relación cobró fuerza gracias a su devoción al surf durante su adolescencia. Cuando era un estudiante universitario, Shadbolt se enamoró de la fotografía y deseaba capturar las olas, pero no estaba seguro de cómo hacer realidad este llamado. Una vez que se convirtió en director de arte para una revista de surf y compró el equipo correcto para fotografiar bajo el agua, comenzó a explorar el océano con nuevos ojos.

Shadbolt es experto en transmitir la inmensidad del océano mientras muestra sus detalles más finos y dramáticos. Sus composiciones más impactantes retratan olas gigantes donde las corrientes forman picos blancos y producen aguas espumosas nacidas de un inmenso poder. Es aquí, en estas fascinantes imágenes fijas, que vemos las “venas” de una ola—ya sea subiendo por una cresta o inclinándose en un relativo momento de calma. En ocasiones, Shadbolt presenta ambos estados en una misma fotografía como una forma de recordarnos que la naturaleza toma muchas formas que a veces contrastan entre ellas mismas.

Tuvimos la oportunidad de charlar con Shadbolt sobre su aventura en la fotografía de olas. A continuación, lee la entrevista exclusiva de My Modern Met.

¿Cuándo descubriste tu pasión por el océano?

No estoy seguro de que haya habido un punto de inflexión definitivo, ya que el océano fue parte de la vida cotidiana durante mi infancia en la costa de Australia. Es parte del tejido de tu juventud, aprendes a entenderlo y respetarlo desde temprana edad. No estoy seguro de si solo soy yo, pero siento que, para cualquiera que haya crecido junto al océano, ocurre un llamado tácito. Puede ser todos los días, o tal vez una vez al mes o incluso menos, pero eventualmente, debes volver al océano para reajustarte. Especialmente si hay algo grande sucediendo, [el océano] tiene una energía que te trae de vuelta y te distrae de cualquier otra cosa.

¿Qué te inspiró a comenzar a tomar fotografías de olas?

Cuando era más joven siempre dibujaba y pintaba, pero cuando llegué a la adolescencia, el surf se convirtió en una adicción. Un poco más tarde, durante mi primer año de universidad cursando una licenciatura en artes, todavía no sabía qué quería hacer con mi vida, pero uno de los cursos que tomé fue fotografía y realmente me encantó. Terminé cambiándome a una licenciatura en comunicación visual y había mucha fotografía en eso. Siempre había querido entrar a la fotografía de surf, pero realmente no sabía por dónde empezar o si era una carrera viable. Después de trabajar en diseño gráfico durante unos años, terminé como director de arte para una revista de surf y, al mismo tiempo, también había comprado una cámara réflex digital y una carcasa submarina, así que tenía una salida directa para fotografiar surf y ahí fue donde todo comenzó.

¿Cuál es tu parte favorita de fotografiar el mar?

Simplemente estar cerca del océano es la mejor parte. Es como un botón de reinicio o una forma de meditación. Me siento muy privilegiado de experimentar estos extremos de la naturaleza, realmente se trata de la experiencia más que nada, las fotos resultantes siempre son solo un simulacro.

¿Llegas con un plan de lo que quieres fotografiar? ¿O, con base en las condiciones del agua en ese momento, tienes que ser espontáneo con tus composiciones?

Tiendo a entrar en un proyecto o en un lugar específico con un concepto en mente, pero con tal dependencia en que la naturaleza haga su parte, las condiciones finalmente determinan la dirección final. Puede ser frustrante cuando el oleaje, el sol o el viento no cooperan como lo había previsto en mi mente, pero me gusta tener esa flexibilidad y aprovechar la experiencia de estar en el momento.

Parece que a veces estás en el mar cuando tomas fotos, y en otras ocasiones pareces trabajar desde las alturas. ¿Las consideraciones para tus fotos cambian según el lugar en el que estás?

Esto depende de todos los factores ambientales, así como de lo que estoy tratando de lograr. Debes tener en cuenta la ubicación donde estás trabajando, el tamaño del oleaje, la marea, el viento, la luz disponible y combinarlo con un concepto o idea. A menudo tengo ciertas ubicaciones en mente para algunas condiciones específicas, pero en muchas ocasiones las condiciones solo se alinean una o dos veces al año.

¿Qué clase de equipo utilizas para tus fotos?

La tecnología definitivamente tiene un papel importante en cómo miro e interactúo con el mundo. Estoy interesado en cómo la tecnología puede expandir aún más nuestra comprensión o experiencia de la realidad, y poder tener acceso a nuevos equipos que ofrecen nuevas perspectivas es algo que estoy explorando en este momento. En cuanto a la cámara que uso, trabajo con varias, algunas digitales y otras análogas en función del proyecto, pero la que más uso es la Nikon D850.

¿Qué tipo de equipo especial usas para fotografiar dentro y cerca del agua?

Para equipos subacuáticos y de protección, he estado usando carcasas submarinas y protectores climáticos AquaTech por más de 10 años y son lo que más recomiendo. También he tenido recientemente una carcasa submarina compuesta por un flash Broncolor Siros 800 con el que he estado experimentando.

La dualidad es un motivo común en tu trabajo. ¿Por qué te intriga? ¿Has encontrado formas diferentes de explorar esta idea?

Esta es definitivamente una narrativa que descubrí a través de mi trabajo. Siento que cualquier cosa que explore el océano, o incluso solo el agua, en general, examinará la dualidad y el equilibrio como tema central. El agua oscurece y limpia, según cada perspectiva. Es realmente una cuestión de entender que la naturaleza es una representación y un reflejo de la vida. Los absolutos son de naturaleza rara, y poder apreciar y comprender múltiples perspectivas es lo que te permite aprender y progresar, y trato de ver lo que fotografío a través de ese mismo lente.

Tus tomas son bastante extremas. ¿Qué es lo más atrevido que has hecho durante una sesión?

Creo que un viaje reciente a las Islas Aran: fotografiar desde la cima de acantilados escarpados de 45 metros de altura con ráfagas de viento de 90 km/hr y lluvia torrencial fue bastante intimidante. Puede que haberlo hecho solo no haya sido la idea más inteligente. No parece tan arriesgado en ese momento hasta que lo ves en retrospectiva. Nuevamente, todo es cuestión de perspectiva.

¿Qué sigue para ti? ¿Algo emocionante que puedas contarnos?

¡Mi esposa y yo esperamos nuestro primer hijo en unos meses! Estoy muy emocionado de comenzar una familia. Actualmente estoy trabajando para una exposición en Sydney en la galería Michael Reid para finales de este año, así como una exposición colectiva en la Galería Regional Gosford en diciembre. Recientemente he estado experimentando con esculturas y videos; estoy emocionado de expandir mi práctica a nuevos medios.