Los mejores diarios para cualquier tipo de autodescubrimiento

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Los seres humanos tienen una necesidad natural de registrar eventos y emociones. Es por eso que los diarios han existido en varias formas desde hace siglos. Antes de que el mundo se computarizara, hacer reportes sobre el clima, eventos políticos y transacciones de negocios era una parte importante de la vida cotidiana. Los diarios evolucionaron de esta necesidad de mantener registro de las cosas, pero también del deseo humano de procesar sentimientos.

Aquí te contaremos un poco de la historia de los diarios y te mostraremos algunos de los mejores para registrar tus sueños, pensamientos y más.

Una breve historia de los diarios

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Los diaristas más famosos de la historia escribieron sobre temas diversos. A menudo citado como el primer diarista verdaderamente moderno, Samuel Pepys llenó varios volúmenes detallando sus emociones y vivencias en Londres durante el siglo XVII. Pero antes de que lo hiciera, ya existían otros tipos de diarios.

Los diarios de viajes se hicieron populares durante el Renacimiento, ya que hacer un “gran tour” de Europa era común entre los jóvenes ricos. También se escribieron diarios místicos, aunque no sean inmediatamente familiares para el lector moderno. El Libro de Margery Kempe registra el desarrollo autobiográfico espiritual y temporal de su escritora, Margery Kempe, una mística inglesa del siglo XIV.

Para los soldados que lucharon en las dos Guerras Mundiales, escribir en diarios se volvió una forma de sentirse menos solos. Durante este tiempo, otros, como Ana Frank, escribieron diarios que registraban los hechos del momento desde un punto de vista civil. Obras como estas son útiles para los historiadores, pero también pueden convertirse en clásicos perdurables por su valor literario y emocional. Algunos escritores de diarios han sido profundamente conscientes del momento histórico y su lugar en el curso de los eventos. Otros registran los detalles mundanos de comidas, salidas y relaciones personales. Cada uno es una ventana a la vida de otra persona.

Escribir un diario en el sentido moderno—como forma de expresar y procesar sentimientos—es una idea reciente. Mientras que los diaristas históricos pueden haber escrito para satisfacción personal o liberación emocional, en la década de 1960 el psicólogo Dr. Ira Progoff fue pionero en su método de diario intensivo. El primer uso prominente del diario como terapia, la relación entre el diario y el yo comenzó a ser explorada como un medio de desarrollo personal. En la década de 1980, el diario ganó fuerza en la educación primaria. Permitiendo a los estudiantes explorar sus pensamientos y reflexionar sobre el material que aprendieron.

El diario para el crecimiento personal abrió naturalmente la puerta a diarios hechos a medida y que se adaptan a las necesidades de cada uno. A pesar de la proliferación de la tecnología, poner el lápiz en el papel no ha perdido su atractivo. Ya sea que busques curación, disciplina, diversión, o simplemente un lugar en el que puedas vaciar tus pensamientos, hay un diario para ti. Echa un vistazo a nuestra lista de los mejores diarios para acompañarte en cualquier viaje de autodescubrimiento.