La mayoría de los atletas profesionales se retira antes de cumplir 40 años; y en la gimnasia, incluso sucede mucho antes, poco después de los 20 años. La intensa exigencia física de este deporte le pasa factura al cuerpo, pero la gimnasta uzbeka Oksana Chusovitina, de 46 años, ha tenido una increíble carrera de tres décadas en este deporte. Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 fueron la octava y última olimpiada para esta medallista de oro. Este agridulce y emotivo momento fue recibido con una ovación de pie por parte de quienes estaban en el estadio.
Chusovitina tenía apenas 16 años cuando compitió por primera vez en el Campeonato Mundial de 1991 como parte del equipo de la Unión Soviética. Llegó como suplente, pero fue convocada para reemplazar a su compañera Yelena Grudneva (quien se había lesionado) y así ganó medallas de oro y plata. Su primera aparición en los Juegos Olímpicos fue en Barcelona 1992, y ha participado en siete Juegos Olímpicos más desde entonces. A medida que su carrera progresó, Chusovitina se especializó en el salto de caballo, y logró mantenerse entre las ocho mejores del mundo. Esta icónica atleta incluso tiene cinco movimientos complicados que llevan su nombre.
En Tokio, Chusovitina realizó dos saltos con la esperanza de clasificarse para la final del evento. Sin embargo, su (muy respetable) puntaje de 14.166 no fue lo suficientemente alto para avanzar en la competencia, y luego le anunció a los reporteros que esos serían sus últimos Juegos Olímpicos. A pesar de cómo concluyó su carrera, Chusovitina logró terminar su última competencia sin lesiones. Esta legendaria atleta está tan en forma como siempre, pero sus razones para retirarse son personales. Al hijo de Chusovitina, Alisher, le diagnosticaron leucemia en 2002. “Mi hijo tiene 22 años y quiero pasar tiempo con él. Quiero ser madre y esposa”, le dijo a los reporteros.
Después de su salto final, una conmovida Chusovitina recibió una ovación de pie por parte del poco público presente, conformado en su mayoría por sus compañeros atletas. “Fue muy lindo”, le dijo después a los reporteros. “Lloré de alegría porque mucha gente me ha apoyado por mucho tiempo”. Añadió: “Cuando me inicié en la gimnasia, nunca pensé en los Juegos Olímpicos. Solo empecé en el deporte y me encantaba hacer gimnasia. Estoy muy orgullosa de lo que he logrado, de estar en este deporte, y quiero agradecer a todos los involucrados”.
La gimnasta uzbeka Oksana Chusovitina, de 46 años, compitió en sus octavos y últimos Juegos Olímpicos.
La legendaria gimnasta ha competido en los Juegos Olímpicos desde 1992.
Después de su salto final, una conmovida Chusovitina recibió una ovación de pie por parte de los presentes.
Nombre: Oksana Chusovitina
Edad: 46 años
Especialidad: salto
Es la gimnasta más longeva de #Tokyo2020 y estos son sus octavos Juegos Olímpicos ¡Impresionante! #TokyoRTVE25J https://t.co/0AO2C1q51t pic.twitter.com/ldFp4lleWx— RTVE Deportes (@deportes_rtve) July 25, 2021
Oksana Chusovitina, gimnasta de artística con más participaciones en unos JJOO. ¡Eres admirable! Faltó el pabellón lleno aplaudiendo tu hazaña pero desde casa el mundo se rindió a tus pies. ♥️.#tokyo2020 #OksanaChusovitina pic.twitter.com/hwRqMUluMA
— (@almudenacid) July 25, 2021
Oksana Chusovitina: Instagram
h/t: [People]
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