Ben van Berkel de UNStudio habla sobre Brainport Smart District

Foto: Plomp

En la ciudad de Helmond, al sur de los Países Bajos, el despacho neerlandés de arquitectura UNStudio trabaja para construir “el vecindario más inteligente del mundo”. Valiéndose de un uso innovador de los datos de sus residentes para mejorar su calidad de vida, el Brainport Smart District se expandirá por 155 hectáreas. A partir de un diseño flexible, este barrio crecerá de acuerdo con las exigencias de sus residentes y, cuando alcance su punto máximo, albergará 1,500 residencias y casi 12 hectáreas de espacio comercial.

En julio de 2018, UNStudio fue seleccionado para conformar el equipo de expertos que harían realidad este entorno único y sustentable. De la mano de Felixx Landscape Architects (diseño de paisaje y ecología), Metabolic (circularidad), Habidatum (análisis de datos y modelado), y UNSense (datos y estrategia tecnológica), el despacho acaba de revelar el plan maestro para este vecindario. El proyecto evolucionará durante los próximos 10 años, ya que se aplicará la última tecnología para darle vida a “un vecindario sustentable, circular y socialmente cohesivo que disfrute de la generación conjunta de energía, producción de alimentos, gestión del agua, manejo conjunto de datos digitales y sistemas de transporte revolucionarios”.

En este “laboratorio viviente” las residencias se ubicarán en los límites de un gran parque, con comercios y reservas naturales a su alrededor. El paisaje será usado como un entorno que proveerá comida, energía, agua, y biodiversidad, convirtiéndolo en un lugar para la experimentación. Como primer paso, UNSense –compañía hermana de UNStudio– se encuentra desarrollando un proyecto de prueba dentro del distrito. Esta área residencial contendrá 100 casas y los primeros participantes estarán a la vanguardia de este innovador experimento. Con una creciente necesidad por ciudades y barrios “inteligentes”, así como un responsable de los datos personales, el mundo debe poner atención al desarrollo de Brainport Smart District.

Recientemente tuvimos la oportunidad de hablar con Ben van Berkel, fundador y arquitecto principal de de UNStudio, sobre este revolucionario proyecto, lo que lo separa de otros proyectos de planeación urbana “inteligente”, y sus ideas sobre cómo la arquitectura puede ayudar a mejorar el ambiente. Continúa hacia abajo para leer nuestra entrevista exclusiva.

Plan maestro (Foto: UNStudio)

¿Por qué es tan importante para UNStudio participar en un proyecto como Brainport Smart District?

Para nosotros es fascinante estar involucrados en un proyecto como este, principalmente porque es único y está tan enfocado hacia el futuro. Es un desarrollo verdaderamente holístico e impulsado por el futuro, pero lo más importante es que abarca plenamente la idea de “aprender haciendo”, en múltiples niveles integrados al mismo tiempo. Brainport Smart District está buscando nuevos modelos de vida que sean sustentables tanto ambiental como socialmente; modelos que no son verticales, sino que están investigando formas novedosas a través de las cuales podemos diseñar vecindarios para el futuro que verdaderamente beneficien a las personas que viven en ellos.

El enfoque holístico de BSD es muy importante, ya que estamos investigando muchas facetas diferentes al mismo tiempo: circularidad, participación de (futuros) habitantes, cohesión social y seguridad, salud, datos, nuevas tecnologías de transporte y sistemas de energía independientes. Pero la solicitud de diseñar una visión urbana flexible que evolucionara y creciera con el tiempo resultó igual de interesante para nosotros en UNStudio, en lugar quedarnos con algo completamente planificado desde el principio, como suele ser el caso.

Nuestras ciudades se están saturando, mientras que las necesidades de los habitantes de las ciudades y las tendencias sociales están cambiando a gran velocidad. Por lo tanto, es extremadamente importante, de hecho, es esencial, que comencemos ahora a investigar a fondo cómo podemos dar forma a nuevos desarrollos como este para el futuro. Una iniciativa audaz y experimental como BSD lo hace posible.

Foto: Plomp

¿Cómo se diferenciará Brainport de otros “vecindarios inteligentes” que se encuentran en fases de desarrollo en otras partes del mundo?

En última instancia, la mayor diferencia es que BSD no ha sido iniciado por una empresa de tecnología grande y poderosa que puede estar buscando nuevas formas de recopilar datos “valiosos” para sus propios fines y beneficios comerciales más amplios y no especificados. Tampoco es simplemente una iniciativa vertical que fue diseñada para aumentar la eficiencia de una ciudad y sus operaciones diarias. En cambio, en términos de datos, BSD buscará específicamente nuevas formas de recopilar, administrar y aplicar datos de manera que estén diseñados para beneficiar a la comunidad en varios niveles.

Con esto en mente, nuestra empresa hermana UNSense está llevando a cabo un estudio de factibilidad para uno de los subproyectos que se llevarán a cabo dentro del distrito: la creación de un entorno de prueba conformado por 100 casas. Tenemos contemplado que en este entorno podremos investigar cómo los datos pueden mejorar la vida y el trabajar en la ciudad cuando las personas tienen la posibilidad de elegir y controlar sus propios datos y cómo se les asigna en última instancia. Este es un enfoque diferente al de la mayoría de las iniciativas de ciudades inteligentes que se han llevado a cabo hasta ahora.

Las ciudades inteligentes prometen mucho, pero también plantean muchas preguntas con respecto a la privacidad y los modelos de negocio poco claros o no transparentes con respecto a la propiedad de los datos (o falta de ellos). El proyecto de las 100 casas aún se encuentra en sus etapas iniciales, pero el objetivo final es llevar el potencial de una ciudad basada en datos al siguiente nivel, centrándose en cómo los datos pueden beneficiar inmediatamente a las personas que los suministran. En este proyecto experimental, UNSense quiere explorar modelos de negocios locales y justos para ciudades a partir de los datos.

Sin embargo, aunque hemos formulado estos objetivos y ambiciones, la forma en que se desarrollarán los planes para el proyecto 100 Casas en sus múltiples, variadas y extremadamente complejas especificidades dependerá de cualquier número de factores durante los próximos seis meses. Una cosa de la que estamos muy seguros es que el proyecto activo resultante en sí mismo será un proceso de aprendizaje mediante la prueba, el ensayo y el error.

Por eso nos referimos a él como un entorno de aprendizaje de la vida real.

Foto: Plomp

¿Cuál es el desafío principal en un proyecto de planeación urbana como este?

Facilitar lo desconocido y, hasta cierto punto, lo incognoscible.

¿Qué medidas se están tomando para asegurarse de que las necesidades de los residentes reales serán satisfechas?

En BSD, los residentes están involucrados desde el principio. Sus necesidades, sus prioridades, [y] sus ideas se incorporan desde el principio. Esto es lo que quise decir anteriormente sobre un enfoque vertical, y va de abajo hacia arriba. No estamos hablando aquí de métodos de autosuficiencia o autogestión previamente probados para la creación de nuevas comunidades utópicas.

Estamos hablando de convertir a los residentes en una parte esencial del proceso de diseño y desarrollo de un distrito completamente nuevo, en colaboración con los planificadores de ciudades, diseñadores, arquitectos y expertos de muchos otros campos. Las necesidades de los residentes se cubrirán porque son una parte integral del diseño y la evolución del proyecto. Como resultado, el distrito aprenderá de ellos y crecerá con ellos.

Esquema de paisaje híbrido. (Foto: Felixx Landscape Architects)

La sustentabilidad y la tecnología son dos partes importantes de Brainport Smart District. ¿Puedes contarnos algún ejemplo de cómo estos principios se incorporarán al diseño?

El universo tecnológico de BSD se presenta como un marco para compartir datos e información con el fin de enriquecer la eficiencia de los paisajes, edificios y espacios públicos. Los servicios basados en datos se diseñarán y probarán para la vivienda, el trabajo, la movilidad, el comercio minorista y la producción de alimentos y energía.

La sustentabilidad y la circularidad son importantes en la visión urbana, pero también lo son las ideas que rodean el compromiso de la comunidad y la interacción social; sustentabilidad social, por así decirlo. Se alienta a los residentes a adoptar esquemas de recursos comunales como la generación de energía compartida y el cultivo de la tierra.

Para la parte del paisaje de la visión urbana, trabajamos con Felixx Landscape Architects y esto juega un papel extremadamente importante en el proyecto. El paisaje se utiliza no solo para la recreación, sino también como un entorno que provee alimentos, energía, agua, procesamiento de desechos y biodiversidad.

Visión urbana: trabajo. (Foto: UNStudio)

¿Por qué crees que es importante que los arquitectos den un paso adelante y participen en proyectos que ayuden al medio ambiente?

No solo es importante; es esencial. Nosotros diseñamos los entornos que las personas habitarán en el futuro (cercano) y estos entornos deben fomentar y facilitar un uso y estilos de vida saludables y sustentables. Como arquitectos, tenemos que abordar cada diseño con la salud tanto del usuario como del planeta como prioridad en nuestras mentes. Si no hacemos eso, algo estamos haciendo mal.