El Volkswagen Beetle es conocido por su bonito y redondeado exterior que es ideal para desplazarse por la ciudad. Este vehículo ha tenido una larga historia en este sentido: el modelo fue introducido en la década de 1930, pero en los años 70, hubo un impulso para hacer que el coche fuera más versátil. En concreto, un vehículo que pudiera conducirse y que te permitiera dormir cómodamente durante las vacaciones. El resultado fue el Volkswagen Super Bugger, una creación mitad “vocho”, mitad caravana que utiliza la parte delantera del coche y la une a una casa rodante. Esta combinación sigue llamando la atención de la gente hoy en día, y un modelo de color amarillo brillante recientemente se vendió en una subasta.
El vehículo hecho a la medida se ha mantenido prácticamente igual desde su creación en la década de 1970. Cuenta con un chasis de Volkswagen Beetle de 1969 con un motor de Super Beetle de 1973. El interior original está intacto y es “correspondiente a su época” con una radio AM/FM CB. Amada por el mismo propietario durante 52 años, entrar en esta caravana debe sentirse como si te transportaran a mediados del siglo XX.
El nuevo propietario del Super Bugger tendrá espacio para dos personas y una configuración de estufa exterior y propano que hace que acampar en un parque para vehículos sea facilísimo. Y un vehículo como este es, sin duda, una gran forma de iniciar una conversación.
Este Volkswagen Beetle amarillo fue transformado en una caravana para dos personas.
La transformación se conoce como Super Bugger, que fue popular en los años 70.
Recientemente se vendió en una subasta, ¡y aún tiene sus interiores originales!
h/t: [designboom]
Todas las imágenes vía Mecum Auctions.
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