El fotógrafo Yener Torun adora el color. Si bien muchas personas piensan que los paisajes urbanos son tristes y aburridos, Torun ve las cosas de otra manera. El fotógrafo turco, quien estudió arquitectura, pasa sus días paseando por las calles de Estambul para encontrar edificios arcoíris que demuestran que la vida urbana puede ser colorida.
Torun crea sus composiciones con una precisión increíble. Cada toma es exacta, y los resultados son tan surrealistas que parecen salidas de una película. Dada la cualidad gráfica de su trabajo, no es ninguna sorpresa que Torun se haya interesado por el diseño mucho antes de tomar una cámara. Al fusionar todos sus intereses, su trabajo ha progresado y esto se ha visto reflejado en su cuenta de Instagram: ahora tiene casi 200,000 seguidores que observan cada uno de sus movimientos.
Hoy en día, Torun tiene el objetivo de explorar algunas de las otras ciudades de Turquía. Ankara, Esmirna y Antalya son sólo algunos de los otros escenarios urbanos donde Torun ha sido capaz de encontrar arquitectura tecnicolor. Al compartir su trabajo en línea, el fotógrafo está rompiendo con las expectativas de Turquía. Centrándose más en la colorida arquitectura contemporánea que en sus monumentos históricos, Torun ofrece una visión única de este país.
“Es posible encontrar algo inspirador en casi todos los rincones de la ciudad”, ledice Torun a My Modern Met. “No siempre descubrirás algo bonito, pero seguro encontrarás algo original. Y aunque algunos de los descubrimientos son algo atroces, es muy satisfactorio encontrar los mejores ángulos para convertirlos en obras de arte”.
“Creo que mi trabajo ofrece una visión alternativa de Estambul—o incluso de Turquía—y ayuda a la gente a formar una idea más profunda sobre ella. Lo que muestro en mis fotografías no son cosas muy comunes y soy consciente de que mi enfoque es algo idiosincrásico, pero estas fotografías tienen un factor sorpresa que hace que la gente se dé cuenta de que aún les queda mucho por saber acerca de esta ciudad y su dinámica”.
Para Torun, cada foto es también un reflejo de sí mismo, lo que hace que su trabajo sea extremadamente personal. El fotógrafo espera que su trabajo inspire a otros creadores a tomar riesgos y experimentar con nuevos proyectos. Después de todo, como demuestra su éxito, nunca sabes lo que puedes encontrar.