Cuando se trata de planear un viaje, existen dos tipos de personas: las que buscan experiencias inmersivas, y las que quieren descansar y relajarse. Con el objetivo de complacer a ambas partes, algunos hoteles alrededor del mundo le han dado un giro artístico a la hospitalidad: además de sus elegantes interiores, varios exhiben esculturas impresionantes, y otros incluso tienen colecciones que los hacen parecer museos de arte.
Al combinar cultura y confort, estos hoteles de arte, o art hotels, invitan a los huéspedes a dormir al lado de obras maestras de algunos de los artistas más famosos del mundo. Tal como las colecciones que encontrarías en un museo, el arte que se exhibe en estos hoteles únicos tiene una curaduría basada en estilos y movimientos específicos. Por lo tanto, ya sea que te guste el arte decorativo antiguo o que prefieras obras maestras más modernas, estos impresionantes hoteles tienen algo para todos los gustos.
¿Listo para hacer check in? Echa un vistazo a estos hoteles de arte.
Chambers Hotel (Nueva York)
Localizado en la Gran Manzana, Chambers Hotel tiene una gigantesca colección de arte contemporáneo. Descrita como “más que una simple muestra de imágenes bonitas”, esta colección de 500 piezas llena de vida las paredes del lobby, la biblioteca, las habitaciones y los pasillos del hotel. Además, cada piso cuenta con una instalación única hecha por artistas como John Waters y Sheila Pepe.
The Arch (Londres)
El lujoso hotel Arch en Londres cuenta con una “amplia gama de suites y habitaciones llenas de arte”. Además del hermoso papel tapiz pintado a mano y su hermosa arquitectura gótica, este hotel alberga pinturas, esculturas y collages vanguardistas de las nuevas promesas del arte contemporáneo, como Julie Cockburn, Linda Culverwell y Vincent Poole, lo que se traduce en una estética que combina el pasado con el futuro.
La Colombe d'Or (Saint-Paul-de-Vence)
Ubicado en St-Paul-de-Vence —una comunidad culturalmente rica en el sureste de Francia— La Colombe d'Or es un hotel con una historia cautivadora. Fundada en la década de 1920, esta cafetería convertida en posada atrajo a una gran variedad de artistas durante el siglo XX. Ahora, el hotel y su famoso restaurante continúan atrayendo a amantes del arte de todo el mundo con una colección de piezas de maestros modernos, desde Picasso y Matisse hasta Miró y Calder.
