Cada año, el Instituto Australiano de Fotografía Profesional (AIPP, por sus siglas en inglés) organiza varios concursos de fotografía impresa para sus miembros. Desafortunadamente, 2020 resultó ser un año complicado debido al COVID-19, por lo que el grupo necesitaba encontrar una nueva forma de unir a la comunidad fotográfica australiana. Con esto en mente, se concibieron los premios AIPP Silver Lining Awards.
Los premios, que se celebraron completamente en línea, pusieron en marcha varias iniciativas para que fuera una experiencia educativa, motivadora e inspiradora para todos los involucrados. En primer lugar, se invitó a los fotógrafos a presentar imágenes previas al concurso que fueron evaluadas por un panel de jueces expertos. Esta valiosa retroalimentación fue utilizada luego para elegir sus entradas finales. La AIPP también organizó el concurso en dos amplias categorías: Creativa y Clásica. Esto permitió a los fotógrafos centrar su atención en las 10 subcategorías que se encontraban bajo estos dos temas. Por último, crearon las categorías de Estudiante y Novato para promover las envíos de todos los niveles de experiencia.
“La idea era sacar algo bueno de la situación actual”, explica Tony Hewitt, que es presidente del comité de premios de la AIPP. “Queríamos no solo dar a los miembros una salida creativa en un momento en el que muchos no tendrían mucho trabajo, sino también hacer toda la experiencia mucho más beneficiosa profesionalmente para todos los participantes. Al mismo tiempo, queríamos que todos se divirtieran un poco. Y funcionó de manera brillante; la respuesta ha sido grandiosa con 3,000 imágenes participantes, de las cuales seleccionamos 300 semifinalistas y luego 120 finalistas, 10 en cada una de las seis categorías”.
Los increíbles ganadores de cada categoría hablan del éxito de la competencia. Al destacar el diverso talento fotográfico de Australia, la AIPP ha creado un rayo de luz durante lo que ha sido un momento difícil para muchos. Estos fotógrafos también fueron premiados de un fondo de 45,000 dólares, y se les concedieron premios innovadores como talleres y sesiones de tutoría. Seguramente, estos premios serán aún más valorados durante una época en la que muchos fotógrafos se encuentran sin trabajo. Gracias a la AIPP, tienen aún más razones para seguir involucrados y mantenerse creativos.