La fotógrafa Lilia Alvarado captura los momentos mágicos y despreocupados que hacen entrañable a la infancia. Su pasión por la fotografía comenzó después del nacimiento de sus gemelas, Annabella y Juliette, que a menudo son las protagonistas sus impresionantes y bellos retratos. Sin embargo, cuando Alvarado publicó en Instagram una foto de la que estaba orgullosa, se sorprendió al recibir comentarios que cuestionaban si la imagen había sido editada en exceso. Desde entonces, se ha comprometido a crear conciencia sobre la historia de la fotografía y desafiar las ideas preconcebidas de la manipulación de fotografías. Para hacerlo, ha comenzado a publicar sus imágenes antes y después de ser editadas.
“Las reacciones variaron; fueron desde muy positivas hasta las que negaron a mi trabajo el título de ‘fotografía’, llamándolo ‘gráficos de computadora’”, dice Alvarado sobre la primera imagen controversial en su Instagram. “Esto me hizo pensar. ¿La gente realmente entiende el concepto de fotografía? ¿Por qué están tan en contra de la manipulación de fotografías? […] La manipulación de imágenes no comenzó con Photoshop. De hecho, siempre ha sido una parte esencial de lo que hacen los fotógrafos”, añade la fotógrafa.
Se cree que la primera fotografía conocida fue tomada por Joseph Nicéphore Niépce en 1826. El inventor francés usó una técnica que llamó heliografía, en la cual una superficie de vidrio o metal estaba cubierta por un tipo de asfalto llamado Betún de Judea. El líquido se endurecía en las áreas más brillantes, mientras que el betún sin endurecer se lavaba, revelando la imagen fotográfica. Desde entonces, la manipulación de imágenes se convirtió en una parte clave de la fotografía, ya que los fotógrafos del siglo XIX pintaban directamente sobre negativos de placas de vidrio para eliminar las imperfecciones e incluso a veces pintaban sobre personas o elementos para eliminarlos de la toma.
Hoy en día, los fotógrafos continúan manipulando sus imágenes, pero en lugar de pintar directamente sobre sus negativos, la tecnología moderna les permite usar programas como Photoshop. Desde recortar hasta ajustar los colores y el contraste, estas herramientas de edición digital se utilizan para ayudar a visualizar una historia. “La mayoría de las fotos no son simplemente fragmentos puros del mundo real. Son más bien una historia del mundo real contada de una forma hermosa”, explica Alvarado.
“Creo imágenes utilizando una caja con un orificio que permite la entrada de luz, por lo que definitivamente se pueden considerar ‘foto-grafías’”, dice Alvarado en defensa de su proceso creativo. “El hecho de que edite estas imágenes posteriormente utilizando un programa de computadora no cambia nada. En cualquier caso, no es fundamentalmente diferente de lo que la gente estaba haciendo en el cuarto oscuro hace más de un siglo”.
Ve más de las imágenes de Alvarado en Instagram, o continúa hacia abajo para ver sus fotografías antes y después de ser editadas en Photoshop.