La influencia de Félix Candela en la arquitectura de mediados y finales del siglo XX trasciende sus obras. Su revolucionario uso de la geometría y el concreto inspiraron a figuras como Santiago Calatrava, mientras que su visión dio vida a una serie de estructuras que siempre lucieron adelantadas a su tiempo y aún hoy tienen un aspecto vanguardista.
Si bien la mayoría de sus construcciones no son íconos de una ciudad (a diferencia de algunos de sus contemporáneos, como Pedro Ramírez Vázquez) la obra de Candela introdujo una nueva forma de resolver problemas arquitectónicos, así como un lenguaje revolucionario para su época.
El elemento característico de la obra de Candela son sus paraboloides hiperbólicos: una superficie doblemente curvada. El nombre puede sonar un poco técnico, pero es la forma de una silla de montar o de las papas Pringles. Esto le permitió formar cascarones de hormigón armado de poco grosor que le dieron fluidez a la estructura.
¿Quién fue Félix Candela?
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Félix Candela Outeriño nació el 27 de enero de 1910 en Madrid, España. Estudió en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid, y terminó su carrera en 1935. Un año después recibió una beca para continuar sus estudios en Alemania, pero el estallido de la guerra civil española le hizo cambiar de planes. Candela se unió al Ejército Popular Republicano, en el que fungió como capitán de ingenieros. Tras la derrota de su bando, se exilió en México, cuya ciudadanía adoptó en 1941 y donde se desarrolló como arquitecto.
A principios de la década de 1950, Candela fundó una empresa constructora junto con los hermanos Fernando y Raúl Fernández Rangel, y unos años después se convirtió en profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México. Los años 50 y 60 fueron los más prolíficos para Candela; en esta época diseñó algunos de sus proyectos más grandes, como las estaciones Merced, Candelaria y San Lázaro del metro de la Ciudad de México y el Palacio de los Deportes, una de la sedes de los Juegos Olímpicos de México 68.
En 1971, Candela emigró a Estados Unidos, desde donde continuó desarrollando su creatividad e inscribiendo sus proyectos a concursos y publicaciones especializadas. Falleció el 7 de diciembre de 1997, cuando se encontraba trabajando en su última gran obra: el Oceanogràfic de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia. Tenía 87 años.
A continuación, conoce 8 de los proyectos más importantes del arquitecto Félix Candela
Pabellón de los rayos cósmicos (1951)
Diseñado en colaboración con Jorge González Reyna y Rafael M. de Arozarena, el pabellón de los rayos cósmicos le valió a Candela ser reconocido por su talento como estructurista, ya que fue la primera obra cubierta por un cascarón de concreto conocido como “hypar”. Esta pequeña construcción se ubica en la Ciudad Universitaria de la Universidad Nacional Autónoma de México y estaba proyectada para funcionar como un laboratorio especializado para la medición de neutrones.
Iglesia de la Medalla Milagrosa (1955)
Si bien los proyectos de Candela destacan por su uso de curvas, las líneas de esta iglesia parten del mismo principio: una estructura doblada para crear arcos fascinantes. Aunque de diseño más bien triangular, la nave de la Iglesia de la Medalla Milagrosa se compone de cascarones de concreto, el hilo conductor de la obra de Candela.
Hotel Casino de la Selva (1956)
En la década de 1950, Félix Candela diseñó nuevos edificios para el popular Hotel Casino de la Selva, en Cuernavaca, Morelos, siendo el más famoso el restaurante de estructura ondulante (también conocidos como “techos de paraguas”), que se convertiría en un ícono del lugar. Aunque casi toda la propiedad del Casino de la Selva cayó en el olvido y fue demolida, la célebre estructura curva de Candela sobrevive hasta hoy.
Los manantiales (1958)
Similar a su diseño para el Hotel Casino de la Selva, el diseño del restaurante Los manantiales, ubicado en Xochimilco, al sur de la Ciudad de México, parte de la intersección de cuatro paraboloides hiperbólicos. La estructura, diseñada en colaboración con Joaquín Álvarez Ordoñez, evoca una flor de loto, lo que permitió que el diseño se integrara a los jardines y canales de la zona como una planta flotante.
Planta embotelladora de Bacardí (1960)
Si bien los edificios industriales de Candela no son tan célebres, su visión permitió crear soluciones de arquitectura para este tipo de construcciones. Los seis domos de estilo “hypar” que conforman el armazón de la planta embotelladora de Bacardí, en el Estado de México, tienen una función más práctica que estética; estos elementos hacen frente a los cambios de temperatura, creando una estructura más sustentable.
Palacio de los Deportes (1968)
Probablemente el edificio más célebre de Félix Candela en la Ciudad de México, el Palacio de los Deportes fue una de las sedes de los Juegos Olímpicos de 1968. ¿Su elementos más importante? Su domo de cobre–un material inusual pero muy ligero–y su forma geodésica. En lugar de ser sostenido con columnas, los pilares de concreto en sus cuatro costados actúan como contrafuertes.
Estaciones Merced, Candelaria y San Lázaro (1969)
Estas tres estaciones de la línea 1 del Metro de la Ciudad de México representan el aspecto futurista, y a su vez, práctico y asequible, de la obra de Candela. Desde sus entradas de inspiración geométrica hasta sus característicos pilares con forma de “sombrilla invertida”, estos elementos le permitieron cubrir el mayor espacio posible con el menor número de piezas. Así, Candela combinó su visión con la identidad de un pujante medio de transporte que representaba a una metrópolis en evolución.
Oceanogràfic (2003)
El último proyecto de Candela fue su gran obra maestra: el Oceanogràfic, el acuario más grande de Europa y uno de los edificios más representativos de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, el gran patio de juegos de su discípulo, Santiago Calatrava. Las curvas se hacen uno con el paisaje circundante, dan vida a un espacio aireado y bien iluminado, y evocan las olas del mar, creando el espacio perfecto para el estudio de la vida marina.
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