El monte Fuji es un verdadero ícono de Japón. Su inconfundible forma cónica, a menudo cubierta por nieve, es una silueta muy conocida que aparece a menudo en las estampas japonesas (o ukiyo-e). El artista Hokusai hizo famoso este monumento natural en su serie Treinta y seis vistas del monte Fuji, que incluye su famosa obra La gran ola. Sin embargo, hay mucho más que saber sobre esta impresionante montaña de lo que parece.
Con una altura de 3,776 metros, el monte Fuji es la montaña más alta de Japón, y la segunda más alta ubicada en una isla en Asia. Su proximidad a Tokio (unos 100 kilómetros) hace que su forma pueda verse desde muchos ángulos diferentes en un día claro.
¿Quieres saber más? Sigue hacia abajo para conocer 8 datos curiosos sobre el monte Fuji.
Conoce 8 datos curiosos sobre el monte Fuji.
Es un estratovolcán.
El monte Fuji no es sólo una montaña, también es un estratovolcán activo. Esto significa que fue creado por capas de lava endurecida y tefra, similar al monte Vesubio que destruyó Pompeya.
Es una montaña sagrada.
El monte Fuji ha sido considerado un lugar sagrado de la religión sintoísta desde la antigüedad. La princesa Konohanasakuya es la kami, o deidad, del monte Fuji, y hay varios santuarios en la base y la cima de la montaña dedicados a ella.
El monte Fuji es también uno de los “tres montes sagrados” de Japón, que incluye también al monte Tate y al monte Haku.
La primera persona en llegar a la cima fue un monje.
Según algunos documentos, la primera ascensión conocida del monte Fuji se produjo en el año 663 a.C. y fue realizada por un monje desconocido. La primera vez que un extranjero escaló el monte Fuji fue mucho después, en 1860; el ascenso de Sir Rutherford Alcock tuvo una duración de ocho horas.
La última vez que entró en erupción fue en 1707.
Han pasado más de 300 años desde la última erupción del monte Fuji, en 1707. El monte Fuji es un volcán activo, por lo que corre el riesgo de volver a entrar en erupción. Sin embargo, los datos actuales sugieren que el riesgo de erupción es bajo.
Está rodeado por cinco lagos.
El monte Fuji no es la única belleza natural de la zona. También está rodeado por cinco lagos —el lago Kawaguchiko, el lago Yamanakako, el lago Saiko, el lago Shojiko y el lago Motosuko— y varias fuentes termales.
El monte Fuji aparece en un billete de yen.
En el reverso del billete de 1,000 yenes aparece una imagen poco común del monte Fuji, obra del fotógrafo Koyo Okada, en la que se puede ver su reflejo en el lago Motosu.
No se conoce el origen de su nombre.
El nombre del monte Fuji (富士山) es anterior a los kanjis, que son los caracteres que forman parte del sistema de escritura japonés, junto con el hiragana y el katakana. En cambio, los caracteres utilizados en el nombre del monte Fuji son ateji, que son caracteres que se utilizan por razones fonéticas.
Una de las teorías sobre el origen del nombre proviene de un erudito del periodo Edo llamado Hirata Atsutane, que propuso que el nombre deriva de una palabra que significa “una montaña que se levanta bien formada como la espiga (穂, ho) de una planta de arroz”.
Cada año se celebra un festival del fuego en el monte Fuji.
Todos los años, el 26 y 27 de agosto —que se considera el final de la temporada de escalada— se celebra el Festival del Fuego de Yoshida en la ciudad de Fujiyoshida, situada en la base de la montaña. Cuenta con más de un kilómetro y medio de antorchas encendidas, cuyo objetivo es aplacar la ira del monte Fuji.
Artículos relacionados:
10 Datos sobre Utagawa Hiroshige, el último gran maestro de la estampa japonesa
Este pueblo japonés crea gigantescas ilustraciones en sus arrozales todos los años
¿Qué es maneki-neko? Conoce la encantadora historia del gato de la suerte japonés