Alberto Durero: conoce al pionero del grabado del Renacimiento nórdico

Autorretrato a los 28 años, óleo sobre tabla, 1500 (Foto: Wikimedia Commons, CC0 1.0, Dedicado al dominio público)

El siglo XV fue un periodo de gran desarrollo artístico en Europa. Mientras el Renacimiento italiano es conocido por sus avances en el color y la comprensión de la anatomía, el Renacimiento nórdico popularizó el uso del grabado. Una figura en particular abrió el camino en diferentes técnicas del grabado: el artista alemán Albrecht Dürer (1471-1528), mejor conocido en el mundo hispanoparlante como Alberto Durero.

Aunque el grabado ya existía desde antes, Durero fue el primer artista en elevarlo a una forma de arte. Durero realizó grabados, xilografías y aguafuertes con una meticulosa atención al detalle. Su carrera marcó la primera vez que alguien intentó reproducir ilustraciones realistas, y su abrumador éxito inspiró posteriormente a otros artistas a realizar y distribuir grabados.

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¿Quién fue Alberto Durero? Sigue leyendo para conocer la vida, obra y legado de este artista.

Los primeros años del artista

Autorretrato a los 13 años, dibujo a punta de plata, 1484 (Foto: Wikimedia Commons, Dominio público)

Nacido en 1471 en Nuremberg, Alemania, e hijo de un destacado orfebre, Durero comenzó a producir arte a una edad temprana. Después de trabajar en el taller de su padre durante varios años, Durero, de 15 años, se convirtió en aprendiz de un artista local llamado Michael Wolgemut (1434-1519), quien se especializó en ilustraciones en xilografía para libros y otras publicaciones. Durante este tiempo, Durero pulió sus habilidades de dibujo y se familiarizó con las técnicas de la punta seca y el grabado en madera.

Visitas a Italia

“Manos que oran”, dibujo a pluma y tinta, 1508 (Foto: Wikimedia Commons, Dedicado al dominio público)

Durero hizo dos viajes a Italia en su vida: de 1494 a 1495 y nuevamente de 1505 a 1507. Ambas experiencias fueron muy importantes para su desarrollo artístico, ya que utilizó el tiempo que estuvo ahó para sumergirse en el Renacimiento italiano.

Al copiar pinturas de grandes maestros en forma de xilografías, Durero se volvió más consciente del realismo anatómico, la perspectiva y el detalle. Luego, cuando regresó a Alemania y creó grabados en madera y grabados con este estilo meticuloso, con lo que ayudó a difundir los ideales del Renacimiento italiano en el resto de Europa.

Un vistazo a los grabados de Durero

Grabados en madera

“Rinocerontes”, grabado en madera, 1515 (Foto: Wikimedia Commons, Dominio público)

Después de visitar Italia, los grabados en madera de Durero adquirieron una nueva capa de realismo. Por ejemplo, el artista comenzó a utilizar efectos de modelado de claroscuro para dar a sus impresiones una sensación de profundidad.

Aunque Durero es famoso por sus grabados en madera, lo más probable es que no haya tallado los diseños él mismo; esto probablemente fue hecho por artesanos especializados. En cambio, produjo dibujos muy detallados en el bloque de madera o en papel y luego los pegó en la superficie del bloque.

Durero también produjo uno de sus grabados en madera más elaborados para Maximiliano I, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico y su patrono desde 1512 hasta 1519 (cuando ocurrió la muerte de Maximiliano). Titulado El Arco del triunfo, este magnífico trabajo requirió 192 bloques separados y es una de las impresiones más grandes de la historia del arte.

“El Arco del triunfo”, grabado en madera, 1515 (Foto: Wikimedia Commons, Dominio público)

Grabado

“Melencolia I”, grabado, 1514 (Foto: Wikimedia Commons, Dominio público)

A finales de la década de 1490, Durero aprendió por sí mismo cómo usar un buril (una herramienta de corte de acero) para hacer grabados. En lugar de tallar a lo largo de la veta como en los grabados en madera, los grabados se hacen al final del bloque de madera. Esto permitió a Durero producir obras más complejas, como Melencolia I, que se compone de cientos de líneas y trazos.

Si bien el nombre de Durero ya era reconocido en Alemania y otras regiones del norte de Europa, también comenzó a hacerse de fama en el extranjero. El historiador de arte italiano Giorgio Vasari (1511-1574) incluso escribió sobre los talentos pródigos de este artista alemán.

Artista prolífico en muchos campos, Durero también realizó algunos grabados en aguafuerte. Sin embargo, debido a su escasez, es probable que esta técnica—que requería que el usuario creara un diseño en huecograbado sobre metal—no le pareciera adecuada para su estilo.

“El cañón”, aguafuerte, 1518 (Foto Wikimedia Commons, CC0 1.0, Dedicado al dominio público)

Las pinturas de Durero

“Adán y Eva”, óleo sobre panel, 1507 (Foto: Wikimedia Commons, Dominio público)

Durero es mejor recordado por su grabado, pero también fue un pintor consumado. Inspirado por el uso veneciano del color, creó varias pinturas al óleo sobre temas religiosos y seculares. Muchas de estas piezas, como Adán y Eva, se pueden ver en museos actualmente.

Además, la colección de acuarelas de Durero revela que su obsesión por el realismo y el detalle no se limitaba solo al grabado. Estas piezas muestran las agudas observaciones del artista del mundo que lo rodeaba y lo convierten en uno de los primeros paisajistas.

“Gran mata de hierba”, acuarela, 1503 (Foto: Wikimedia Commons, Dominio público)

El legado de Durero

Foto: Fotos de stock por muratart/Shutterstock

El dominio de Durero de diferentes técnicas de grabado le permitió compartir su arte en toda Europa y lo consolidó como uno de los mejores grabadores. Su éxito inspiró a otros artistas, como Rafael y Tiziano, a aprovechar también el grabado para distribuir su obra por todo el continente.