6 Datos reveladores sobre el excéntrico artista Andy Warhol

 

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En los años 50, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, el Pop Art hizo su debut en Estados Unidos y Gran Bretaña. Si bien varios artistas formaron parte de este revolucionario movimiento, ninguno de ellos jugó un papel tan importante como Andy Warhol.

Si bien Warhol trabajó con una gran variedad de medios, es mejor conocido por sus serigrafías y pinturas policromadas. En la década de 1960 comenzó a crear piezas que, con el tiempo, incorporarían muchas de las características más distintivas del movimiento: imágenes atrevidas y contemporáneas, una paleta de colores brillantes y una estética repetitiva inspirada en la producción en masa.

Aunque su trabajo suele hablar por sí mismo, vale la pena conocer más acerca de la persona detrás del arte. Además de darnos una idea de la forma de pensar de este excéntrico artista, puede ayudarnos a entender la importancia de su trabajo, tanto en el Pop Art como en la historia del arte en general.

Conoce todo sobre la figura más famosa del Pop Art con estos 6 datos sobre Andy Warhol.

 

Una enfermedad le permitió desarrollar sus habilidades a temprana edad.

 

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Andy Warhol nació el 6 de agosto de 1928 en Pittsburgh, Pennsylvania. De muy pequeño fue diagnosticado con corea de Sydehham, un trastorno que le provocó síntomas neurológicos y manchas en la piel. En los peores momentos de su enfermedad tuvo que pasar mucho tiempo en cama, dándole tiempo de sobra para dibujar. Sin embargo, estos episodios no solo fueron cruciales para el desarrollo de sus habilidades artísticas, sino que también lo llevaron a interesarse por la cultura popular. Mientras estaba confinado a su cama comenzó a escuchar el radio y a llenar sus paredes con recortes de revistas y fotografías de celebridades.

 

Empezó su carrera como un exitoso ilustrador de zapatos.

 

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Con los años, el estilo de dibujo que Warhol desarrolló de niño se tradujo bien en la ilustración comercial. Después de obtener un título en diseño pictórico en el Carnegie Institute of Technology y de mudarse a la ciudad de Nueva York en 1949, fue comisionado por Glamour Magazine para ilustrar zapatos en anuncios publicitarios. A principios de los años 50, sus extravagantes ilustraciones de calzado llamaron la atención de Israel Miller, un zapatero de Manhattan, quien le pidió a Warhol que trabajara para él como diseñador de zapatos.

Mucho más que una fuente de ingresos, trabajar con zapatos dio forma a los proyectos personales de Warhol y eventualmente lo llevaría a la fama. “Los zapatos jugaron un papel fundamental en los inicios de la carrera de Warhol como artista comercial”, explica el Tate. “Sus anuncios de calzado de mujer de los años 50 eran famosos y su fetiche por los zapatos y los pies continuó a lo largo de su vida.”

 

Muchas de sus piezas más famosas hicieron su debut en su primer exposición individual en Nueva York.

 

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Los dibujos de zapatos de Warhol no sólo fueron populares entre los diseñadores; también impresionaron al mundo del arte contemporáneo de Nueva York, lo que dio como resultado algunas de sus primeras exposiciones en galerías. Si bien las ilustraciones de calzado constituían la mayor parte de su obra expuesta durante los años 50, Warhol presentó una obra mucho más amplia en su primera exposición individual de 1962.

La muestra tuvo lugar en la Stable Gallery del 6 al 24 de noviembre e incluyó algunas de las piezas más icónicas de Warhol, como Díptico de Marilyn, 100 latas de sopa Campbells y Botellas de Coca-Cola verdes. A excepción de 100 latas de sopa, que fue pintada y estampada a mano, estas piezas fueron elaboradas utilizando pintura acrílica y el método de serigrafía. Este proceso mecánico le permitió al artista reproducir fotografías— específicamente de celebridades populares y objetos cotidianos—como pinturas y, a su vez, crear su propia marca de arte “producido en masa”.

“Si pinto de esta manera es porque quiero ser una máquina”, dijo Warhol en 1963, “y siento que hacer lo que hago y hacerlo como una máquina es lo que quiero hacer”.

 

Su estudio en Nueva York era conocido como “La Fábrica”.

 

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La fascinación de Warhol por la cultura de consumo era evidente en todo su proceso artístico, incluso en su estudio. Aunque su espacio de trabajo cambió de lugar varias veces entre 1962 y 1984, todos fueron conocidos cariñosamente como “The Factory“, o La Fábrica. Aquí, Warhol trabajó con un equipo de asistentes en una especie de línea de montaje—un método que desarrolló a finales de la década de 1950.

“Durante estos primeros años, Warhol sentó las bases de su práctica al delegar fases de su producción artística a sus asistentes, y con frecuencia organizaba ‘fiestas de colorear‘, o reuniones en las que amigos y asociados ayudaban a colorear a mano sus numerosas obras”, explica el Guggenheim. Warhol siguió usando este método de producción en La Fábrica. Sin embargo, además de artistas, sus colaboradores incluían personalidades de la alta sociedad de Nueva York, celebridades de Hollywood y otras figuras famosas.

 

Una escritora feminista radical le disparó y le hirió de gravedad en 1968.

 

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Aunque la mayoría de las personas que visitaban La Fábrica eran amigos de Warhol, una de ellas resultó no serlo. Valerie Solanas, una autora feminista radical con esquizofrenia, conoció a Warhol en los años 60. Después de aparecer en una de sus películas experimentales, Solanas acusó al artista de robar su manuscrito para el Manifiesto SCUM, un libro que ella misma había escrito y editado y que pedía la erradicación de los hombres.

El 3 de junio de 1968, Solanas se presentó en La Fábrica y le disparó a Warhol y a Mario Amaya, un curador y crítico de arte. Mientras que las lesiones de Amaya fueron mínimas, las de Warhol casi acabaron con su vida; dos balas le perforaron el estómago, el hígado, el bazo, el esófago y los pulmones. Sus heridas lo obligaron a usar un corsé quirúrgico por el resto de su vida, y toda la experiencia lo llevó a tener una fobia a los hospitales. Estos miedos lo mantuvieron lejos de las unidades médicas, aún cuando debía someterse a una cirugía de vesícula biliar en los años 80. Tras varios años de negarse a hacerlo, finalmente le realizaron la operación en 1987, pero desgraciadamente ya era demasiado tarde. Murió de un paro cardíaco poco después del procedimiento.

 

Fue representante de una banda, estableció una revista y cofundó una universidad, todo mientras hacía arte.

 

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Aunque Warhol es conocido sobre todo por sus pinturas en serigrafía, su legado va mucho más allá de estas piezas experimentales. De hecho, además de crear obras de arte como dibujos, grabados y esculturas, incluyendo sus famosas cajas Brillo, también llevó a cabo otra serie de proyectos creativos. En los años 60, fue representante y productor de la banda de rock The Velvet Underground, dando origen a uno de sus motivos más icónicos: un plátano para la portada de su primer álbum, The Velvet Underground & Nico. En 1969, él y Gerard Malang, una prominente figura del arte mundial, fundaron la revista Interview, que sigue en circulación hasta el día de hoy. Y, en 1979, cofundó la Academia de Arte de Nueva York con otros “artistas, eruditos y mecenas de las artes”.

Junto con sus creaciones artísticas, estas contribuciones han convertido a Warhol en uno de los artistas más importantes del siglo XX—y en una indudable inspiración para los artistas del futuro.

 

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Sofía Vargas

Sofía Vargas es redactora en español para My Modern Met. Originaria de la Ciudad de México, es licenciada en Lenguas Modernas y tiene un Máster en Gestión Cultural por la Universidad Carlos III de Madrid. A lo largo de su carrera ha trabajado para varias instituciones culturales y ferias de arte en México. Además de escribir, Sofía dedica su tiempo a explorar otras prácticas artísticas, como la cerámica y la ilustración.
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