“La adoración de los Reyes Magos” (c.1891). Cromolitografía de Otto Adolph Stemler , basada en un dibujo de Heinrich Hofmann. (Foto: Wikimedia Commons [dominio público])
En gran parte del mundo hispanoparlante, la temporada navideña llega a su fin con el Día de Reyes, que en la tradición cristiana representa la visita de los tres Reyes Magos a Jesús recién nacido. Actualmente, el Día de Reyes representa una oportunidad para celebrar con la familia en torno a la Rosca (o Roscón) de Reyes y es un día especial en el que los niños reciben regalos.
Aunque tal vez ya estás familiarizado con esta festividad, puede que no conozcas su origen y sus tradiciones a profundidad. Por ello, aquí echaremos un vistazo al Día de Reyes para entender por qué es una celebración tan especial.
¿Qué se celebra el Día de Reyes?
Decoración en la Gran Vía de Madrid. (Foto: Carlos Teixidor Cadenas vía Wikimedia Commons (CC BY-SA 4.0))
El Día de Reyes, una celebración que tiene su origen en la cristiandad, se celebra la noche del 5 al 6 de enero, conocida también como Noche de Reyes. De acuerdo con la tradición bíblica—específicamente, el evangelio de Mateo—un grupo de eruditos provenientes de Oriente llegaron a Belén para rendir tributo y ofrecerle regalos a Jesús. Estos obsequios fueron oro (ya que es visto como un rey), incienso (como símbolo de su divinidad) y mirra (un compuesto embalsamador que representaba su faceta humana y mortal).
En el evangelio de Mateo, nunca se especifica que se trate exactamente de tres figuras, ni de que fuesen reyes: originalmente solo fueron descritos como “magos”–nombre que recibían los sacerdotes y hombres sabios en el Antiguo Oriente, que abarca el norte de África y el occidente de Asia– que llegaron a buscar al “Rey de los judíos que acaba[ba] de nacer”.
Mosaico en la Basílica San Apolinar el Nuevo. (Foto: Nina Aldin Thune vía Wikimedia Commons (CC BY-SA 2.5))
No obstante, fue hasta el siglo III d.C. que se determinó que podían tratarse de reyes, y que debían ser tres dado el número de regalos ofrecidos. La primera mención de sus nombres, Melchor, Gaspar y Baltasar, fue en el mosaico de la Basílica San Apolinar el Nuevo en Rávena, Italia, que data del siglo VI d. C. En el siglo XV, los reyes fueron asignados distintas razas para simbolizar a los distintos continentes: Europa (Melchor), Asia (Gaspar) y Baltasar (África).
La celebración de los Reyes Magos coincide también con la fiesta de la Epifanía, que marca que Jesús ha tomado una forma humana. En el cristianismo oriental, la Epifanía celebra el bautismo de Jesús en el río Jordán, lo que es visto como su manifestación en el mundo como el Hijo de Dios.
Celebraciones del Día de Reyes
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Si bien el culto religioso a los Reyes Magos llegó a América Latina con la introducción del catolicismo, la celebración del Día de Reyes como la conocemos surgió en el siglo XIX en España. La noche del 5 de enero se convirtió en una celebración dedicada a los niños, contemplando que recibieran regalos la mañana del 6 de enero, similar a lo que otros países hacen en Navidad con Santa Claus.
En 1866 se celebró la primera primera cabalgata–un desfile con carros alegóricos–de Reyes Magos en Alcoy, en la provincia de Alicante al sureste de España. La tradición se expandió rápidamente por todas las ciudades de España y algunas ciudades en el continente americano, como Irapuato, México.
Rosca de Reyes (México). Foto: ProtoplasmaKid vía Wikimedia Commons (CC BY-SA 3.0)
La atención al Día de Reyes varía de región a región. Además de los regalos a los niños, el elemento más común en esta fiesta es el roscón o rosca de reyes, un bollo dulce en forma circular–que emula una corona– decorado con fruta confitada y azúcar. No obstante, la repostería contemporánea ha ampliado las posibilidades gastronómicas esta delicia, dando paso a variantes de distintos sabores e ingredientes.
En España, el roscón esconde un haba o una figurilla; quien la descubra debe pagar por el roscón. En México y Guatemala, la rosca contiene una figura que representa al Niño Jesús. Quien la encuentre en su porción de rosca, debe pagar los tamales el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
Los Reyes Magos en el arte
“Adoración de los Reyes Magos” (1609; 1628 — 1629) de Peter Paul Rubens. (Foto: Wikimedia Commons [dominio público])
Como todos los motivos religiosos que rodean a la natividad, como la Virgen con el Niño, los Reyes Magos están ampliamente representados en el arte. El tema recibe el nombre de Adoración de los Reyes Magos, y ha sido abordado por grandes artistas a lo largo de la historia del arte, desde la pintura hasta el vitral.
Entre los artistas que han pintado la Adoración de los Reyes Magos se encuentran Fra Angélico (c. 1440-1460), quien capturó esta escena en uno de los frescos del Convento de San Marcos de Florencia; Sandro Boticelli (1475), cuya versión se encuentra en la Galería Uffizi; el Bosco (1485-1500), quien creó un tríptico; Diego Velázquez (1619), que capturó la escena en una pintura que se encuentra en el Museo del Prado; y Peter Paul Rubens, quien creó dos versiones, una que se exhibe en el Museo del Prado (1609) y otra que forma parte de la colección del Museo Real de Bellas Artes de Amberes (1624).
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