Jorge González Camarena: el pintor que dio color a la historia de México

jorge gonzalez camarena Venustiano Carranza y la Constitución de 1917

“La Constitución de 1917”, 1967. (Foto: Instituto Nacional de Antropología e Historia / Museo Nacional de Historia [CC BY-NC-ND 2.5 MX])

El pintor mexicano Jorge González Camarena se inspiró en el esplendor de la cultura y la historia para producir algunas de las obras más fascinantes de la historia del arte en México. Aunque a menudo es pasado por alto en comparación con otras figuras contemporáneas como David Alfaro Siqueiros y Rufino Tamayo, las pinturas de González Camarena gozan de una estética única de influencia cubista que se apropia de la geometría y el color para contar historias desde un enfoque singular. Además, su profundo compromiso con el legado cultural de México lo convirtió en un defensor de las artes cuya huella aún está presente hoy en día.

 

¿Quién fue Jorge González Camarena?

Jorge González Camarena nació en Guadalajara, Jalisco, el 24 de marzo de 1908. El pintor tuvo siete hermanos, entre los que destaca Guillermo González Camarena (1917-1965), inventor de la televisión a color. Desde la infancia, este pintor mostró una destreza singular para las artes plásticas; tallaba piedras de río, hacía piezas de arcilla y diseñaba historietas que vendía entre sus compañeros de la escuela.

La familia González Camarena se mudó a la Ciudad de México en 1919. Ahí, el pintor Francisco Zenteno–maestro del pequeño Jorge–descubrió sus habilidades artísticas, por lo que le aconsejó inscribirse en la prestigiosa Academia de San Carlos. Tras ingresar a esta escuela de Bellas Artes en 1922, González Camarena se convirtió rápidamente en asistente de Gerardo Murillo, el Dr. Atl, e incluso coloreaba con acuarela las ediciones de su famoso libro Las Iglesias de México (1924-27). Su paso por la Academia no estuvo libre de controversias, ya que formó parte del movimiento estudiantil que buscaba convertir a Diego Rivera en director de plantel para instaurar un plan de estudios más cercano a las corrientes artísticas contemporáneas.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por Museo Nacional de Arte MUNAL (@munalmx) el

 

González Camarena inició su carrera profesional en el mundo editorial y de la publicidad. En 1929, empezó a escribir y dibujar para publicaciones como Revista de Revistas y Nuestro México, además de diseñar algunas imágenes para los famosos calendarios de la imprenta Galas de México. Estos proyectos le permitieron desarrollar su característico estilo basado en una composición geométrica.

Para 1932, González Camarena ya realizaba algunas investigaciones sobre arte prehispánico y popular, por lo que fue comisionado para restaurar los frescos del siglo XVI del convento de Huejotzingo, Puebla. Este fue uno de los grandes proyectos de su vida; durante sus dos años en la zona –y con las ganancias del proyecto–estudió a profundidad la obra de Marcos Cipactli, el último pintor mexica, a quien se le atribuye la creación del lienzo original de la Virgen de Guadalupe.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por MNA_INAH (@mnantropologia) el

 

Los murales de Jorge González Camarena

A finales de la década de 1930, empezaron a llegar comisiones de los murales que definirían la obra de Jorge González Camarena. La primera de ellas fue Alegoría de Zimapán (1939), que fue pintada en un hotel en el estado de Hidalgo.

Su primer mural en la Ciudad de México, Díptico de la vida (1941) fue pintado en el edificio Guardiola, un anexo del Banco de México en el Centro Histórico. La pieza retrataba un desnudo masculino y uno femenino, por lo que desató una agitada conversación sobre la censura y la responsabilidad del artista entre la escena cultural mexicana y sus patronos. El constructor del edificio, Carlos Obregón Santacilia, incluso acusó a González Camarena de “destruir la armonía con la arquitectura”, despertando dudas sobre la provocación del artista al poderoso club de banqueros que tenía su sede en ese edificio. Al final, la construcción quedó dañada por un terremoto en 1957, y el mural no pudo ser rescatado.

jorge gonzalez camarena bellas artes

“Liberación o La humanidad se libera de la miseria”, 1963. (Foto: Elulene vía Wikimedia Commons [CC BY-SA 3.0])

En respuesta a la controversia y destrucción del mural, el Instituto Nacional de Bellas Artes le propuso pintar un mural en el Palacio de Bellas Artes. La pieza, titulada Liberación o La humanidad se libera de la miseria, fue completada en 1963. En ella, el pintor hace una interpretación plástica de la historia de México.

Entre sus murales más célebres se encuentra El triunfo de la cultura (1954), un bajorrelieve policromado que decora el edificio de la Rectoría del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey. La pieza se ha vuelto tan querida que esta obra decora los anillos de graduación de los estudiantes de la universidad. González Camarena también creó murales para instituciones fuera de México, como Presencia de América Latina (1965), ubicado en el campus de la Universidad de Concepción, en Chile. La obra celebra la hermandad y unión entre las culturas latinoamericanas.

jorge gonzalez camarena presencia de america latina

“Presencia de América Latina”, 1965 (Foto: Farisori vía Wikimedia Commons [CC BY-SA 3.0])

Los murales de Jorge González Camarena también decoran algunos de los museos más importantes de México. Las Razas (1964) decora la sala Introducción a la Antropología del Museo Nacional de Antropología, mientras que la pieza La Constitución de 1917 (1967) es parte del acervo mural del Museo de Historia en el Castillo de Chapultepec.

De forma paralela, González Camarena siguió pintando obras de caballete a lo largo de su carrera: se cree que produjo más de 2,000 pinturas. La más popular de ellas es La Patria, una pintura de 1962 que fue la portada de los libros de texto gratuitos de la Secretaría de Educación Pública por varias décadas y aún es considerada una de las pinturas más famosas de la historia de México.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por Lehman College Art Gallery (@lc_art_gallery) el

Legado

En 1966, González Camarena ganó un concurso que lo llevó a realizar un retrato de Miguel Ángel Buonarroti. Hoy, la obra recibe a los visitantes en la casa natal del artista italiano en la villa de Caprese. Por esta pintura, el gobierno de Italia le otorgó la condecoración al mérito en grado de Commendatore della Repubblica en 1967.

A González Camarena también se le atribuye el rescate del fuerte de San Juan de Ulúa, en el puerto de Veracruz. El pintor se encontraba de visita en la ciudad para pintar Águila en Vuelo, un mural de 250 metros cuadrados comisionado por el Banco de México, cuando escuchó que este monumento histórico sería destruido para construir bodegas y un muelle. Esto lo llevó a fundar el Comité Pro Defensa y Restauración del Castillo de San Juan de Ulúa, salvando esta histórica fortaleza que data del siglo XVI.

Jorge González Camarena trabajó hasta el final de su vida. Su último mural, La trilogía de Saltillo, fue pintado en 1978 en Coahuila, y el Museo Soumaya tiene la que es considerada su última pintura: Nuestro tiempo (1980). El pintor falleció el 24 de mayo de 1980 de un derrame cerebral a los 72 años de edad. Por sus méritos, recibió un homenaje de cuerpo presente en el Palacio de Bellas Artes, un honor reservado a grandes figuras del ámbito artístico.

Además de sus extraordinarios murales, algunas de sus obras pueden verse en el Museo de Arte Moderno y el Museo Soumaya de la Ciudad de México. Las piezas de este prolífico artista han rebasado sus medios para convertirse en símbolos de diversas instituciones y eventos históricos no sólo de México, sino de todo el mundo.

Artículos relacionados:

12 Pintores mexicanos que todo amante del arte debe conocer

José Clemente Orozco, el muralista mexicano que exploró la condición humana

“Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central”: el mural clave de Diego Rivera

Regina Sienra

Regina Sienra es colaboradora y redactora en español para My Modern Met. Periodista y traductora originaria de la Ciudad de México. Es egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México, donde cursó la licenciatura en Ciencias de la Comunicación con especialidad en Periodismo. Su pasión por escribir sobre las artes visuales, la música, el cine, la literatura y el teatro ha dado vida a una carrera de casi 10 años en diversos medios culturales de México, Estados Unidos y Canadá.
HAZTE MIEMBRO DE
MY MODERN MET
Como miembro, te unirás a nuestro esfuerzo por apoyar las artes.
HAZTE MIEMBRO
Descubre los beneficios

CONTENIDO PATROCINADO