“Lake of ice” por Cristiano Vendramin (Italia). Ganador del premio del público.
El lago de Santa Croce es un lago natural ubicado en la provincia de Belluno, Italia. En el invierno de 2019, Cristiano notó que la marea estaba inusualmente alta y que los sauces estaban parcialmente sumergidos, creando un juego de luces y reflejos. Esperando condiciones más frías, capturó la escena en una quietud helada. Después de tomar la imagen, recordó a un querido amigo, quien había amado este lugar y ya no está aquí , “Quiero pensar que él me hizo sentir este sentimiento que nunca olvidaré. Por eso, esta fotografía está dedicada a él”.
Casi 32,000 personas participaron en la votación del premio del público de Wildlife Photographer of the Year 2021 (Fotógrafo de vida silvestre del año 2021) y por fin conocimos al ganador: Cristiano Vendramin se llevó este galardón a casa. La imagen de este fotógrafo formó parte de una lista de 25 fotografías de entre las más de 50,000 inscritas al concurso en 2021.
La conmovedora foto de la naturaleza de Vendramin tiene un significado especial. Su evocadora imagen fue tomada en el norte de Italia en el lago de Santa Croce. Ese día en particular, notó que el alto nivel del agua había sumergido parcialmente los sauces. Esto creó un reflejo interesante, que fue realzado por el clima helado. La foto es particularmente significativa para el fotógrafo, ya que este lago era el lugar favorito de un amigo cercano que había fallecido. De hecho, en el momento en que tomó la imagen, estaba pensando en su querido amigo.
“La conmovedora imagen de Cristiano simboliza el impacto positivo que la naturaleza puede tener en nuestro bienestar y nuestras vidas”, dijo el Dr. Douglas Gurr, director del Museo de Historia Natural de Londres. “Puede brindar consuelo y un espacio para reflexionar sobre el pasado e incluso generar esperanza para el futuro. Estos últimos dos años han redefinido lo que realmente importa en la vida, las personas y los entornos que juegan un papel crucial en nuestros propios ecosistemas personales. Espero que aquellos que miran este paisaje congelado en el tiempo recuerden la importancia de conectarse con el mundo natural y los pasos que todos debemos tomar para protegerlo”.
Además de la imagen ganadora, otras cuatro fotografías fueron reconocidas por su calidad. Los cuatro fotógrafos finalistas plasmaron imágenes increíbles de la vida silvestre interactuando con el entorno natural. Desde dos leones machos que comparten un momento bajo la lluvia hasta un oso bebé que duerme plácidamente bajo la atenta mirada de un águila calva, cada uno de ellos cuenta una historia espectacular.
Las cinco imágenes se incluirán en la exhibición Wildlife Photographer of the Year en el Museo de Historia Natural de Londres.
El concurso Wildlife Photographer of the Year ha anunciado al ganador y los finalistas del premio del público.
“Shelter from the Rain” por Ashleigh McCord (Estados Unidos). Finalista del premio del público.
Durante una visita a Maasai Mara, Kenia, Ashleigh capturó este tierno momento entre un par de leones machos. Al principio, había estado tomando fotografías de solo uno de los leones, y la lluvia era solo una ligera llovizna, aunque el segundo león se acercó brevemente y saludó a su compañero antes de alejarse. Pero cuando la lluvia se convirtió en un fuerte aguacero, el segundo macho regresó y se sentó, acomodando su cuerpo como para proteger al otro. Poco después se frotaron las caras y continuaron sentados acariciándose durante algún tiempo. Ashleigh se quedó mirándolos hasta que la lluvia caía tan fuerte que apenas podía verlos.
“Hope in a burned plantation” por Jo-Anne McArthur (Canadá). Finalista del premio del público.
Jo-Anne voló a Australia a principios de 2020 para documentar las historias de los animales afectados por los devastadores incendios forestales que arrasaban los estados de Nueva Gales del Sur y Victoria. Trabajando exhaustivamente junto a Animals Australia (una organización de protección animal), tuvo acceso a sitios para animales quemados, rescates y misiones veterinarias. Esta canguro gris del este y su hijo, que fueron fotografiados cerca de Mallacoota, Victoria, estaban entre los afortunados. La canguro apenas apartó los ojos de Jo-Anne mientras caminaba tranquilamente hacia el lugar donde podía tomar una gran foto. Tuvo el tiempo justo para agacharse y presionar el disparador antes de que el canguro saltara hacia los eucaliptos quemados.
“The eagle and the bear” por Jeroen Hoekendijk (Países Bajos). Finalista del premio del público.
Los cachorros de oso negro a menudo trepan a los árboles, donde esperan seguros a que su madre regrese con comida. Aquí, en las profundidades del bosque templado de Anan en Alaska, este pequeño cachorro decidió tomar una siesta en una rama cubierta de musgo bajo la atenta mirada de un águila calva joven. El águila había estado posada en este pino durante horas y a Jeroen la situación le pareció extraordinaria. Rápidamente se dispuso a capturar la escena desde el nivel de los ojos y, con algunas dificultades y mucha suerte, pudo posicionarse un poco más alto en la colina y tomar esta imagen mientras el oso dormía, sin que la criatura se diera cuenta.
“Dancing in the snow” por Qiang Guo (China). Finalista del premio del público.
En la Reserva Natural de Lishan en la provincia de Shanxi, China, Qiang observó cómo dos faisanes dorados machos cambiaban continuamente de lugar en este tronco; sus movimientos eran similares a una danza silenciosa en la nieve. Las aves son nativas de China, donde habitan bosques densos en regiones montañosas. Aunque de colores brillantes, son tímidos y difíciles de detectar, pasan la mayor parte del tiempo buscando comida en el suelo del bosque oscuro, solo vuelan para evadir a los depredadores o para posarse en árboles muy altos durante la noche.
